Acabado textil

En la manufactura textil, el acabado se refiere a los procesos que convierten la tela tejida o de punto en un material utilizable y, más específicamente, a cualquier proceso realizado después de teñir el hilo o el tejido para mejorar su aspecto, modificando algunas de sus características, como: apariencia (lo que se ve), tacto (lo que se siente), o comportamiento (lo que se hace).

Llamada textil crudo en esta etapa, contiene impurezas naturales y añadidas.

El acabado es una amplia gama de tratamientos físicos y químicos que completan una etapa de la fabricación textil y pueden preparar para el siguiente paso, haciendo que el producto sea más receptivo a la siguiente etapa de fabricación.

[3]​ Algunas técnicas de acabado, como el abatanado, quedaron obsoletas con la Revolución Industrial, mientras que otras, como la mercerización, son desarrollos posteriores.

[4]​ Según la característica que modifique: Según su duración: Según la acción que lo origine: El algodón es una fibra vegetal natural de gran importancia como materia prima para la fabricación de tejidos y prendas de vestir.

Maquinaria de acabado textil, que consta de un conjunto de cilindros secadores de tela (o "latas"), accionada por una pequeña máquina de vapor dúplex diagonal