Otros observatorios ubicados en dicha región son los Interamericano del Cerro Tololo[7] y Gemini Sur,[8] pertenecientes al consorcio AURA/NOAO (siglas en inglés de Association of Universities for Research in Astronomy/National Optical Astronomy Observatories).
[18] Análisis similares proponen alineaciones astronómicas de estructuras, petroglifos y elementos del paisaje en diversos sitios arqueológicos de la cultura Molle, que habitó el Norte Chico durante el llamado período agroalfarero temprano (200 a. e.c.-1000 d. c. para la zona), en lugares como en Rincón Las Chilcas, Cuz Cuz o Valle del Encanto.
Arqueólogos contemporáneos han postulado, también, que los recintos incaicos: pucará de Chena, pucará del Cerro Mauco y cerro Mercachas habrían sido utilizados como huacas con fines, al menos en parte, astronómicos.
[32]Una segunda tablilla que ha concitado una atención menor que Mamari, llamada Keiti, destruida en Bélgica durante los bombardeos alemanes de 1914 pero conservada en imágenes, también ha sido interpretada como información calendárica basada en ciclos lunares por estudiosos como Wieczorek y Pozdniakov.
[25] El sitio Papa ui hetu'u y las tupas han sido interpretadas como "observatorios astronómicos" en estudios de arqueoastronomía.
Esta última penetró en América y en las colonias periféricas, como Chile, solo en alguna medida, sobre todo asociada a algunos marinos, pues era practicada por los llamados "cosmógrafos", peritos en una mezcla de geodesia, cartografía, técnica marinera, saberes meteorológicos y conocimientos astronómicos aplicados a la navegación.
A veces se agrega a ellos al sobreviviente italiano Antonio Pigafetta, que tras completar la vuelta al mundo fue autor de una relación del viaje, que contiene un apéndice cosmográfico titulado Tratatto di Navigazione.
[35] Este se ubicó en su casa en Valparaíso y tuvo como fin principal determinar la hora exacta.
Moesta, contactado por Gillis, puso el observatorio de Santiago en campaña para colaborar en este esfuerzo.
Estos últimos los completaba, además de Santiago, El Cabo en Sudáfrica y Williamstown (Melbourne) en Australia.
Newcomb estimaba que las observaciones de Santiago eran meticulosas, achacando el grado imprecisión a la mala calidad del círculo meridiano y los microscopios locales.
[37] En la actualidad, esta distancia media, que es denominada Unidad Astronómica, se calcula como 149.597.870,7 km.
[40] En 1903 una misión del Observatorio Lick Universidad de California, se instaló en otro promontorio capitalino: el cerro San Cristóbal.
Allí construyeron una "estación chilena" u "Observatorio Lick del Sur", que en 1928 fue comprado por Manuel Foster tras el término de la misión californiana.
Años más tarde, llegaría la Carnegie Institution of Washington al cerro Las Campanas para operar el homónimo observatorio allí en la Región de Atacama.
Es decir, el Instituto involucra 114 personas en tareas relativas a la investigación, además de otras 10 en labores administrativas.
El astroturismo o astronomía turística ha sido desarrollada y operada en Chile por diversas instituciones, agrupaciones e intereses privados.
A este recuento se suman diez observatorios científicos o profesionales que cuentan con programas de visitas para público general.
En 2014 le siguieron en la certificación Pampa Joya, Mano del Desierto y Alto Loa (región de Antofagasta).
Los telescopios pueden trabajar en conjunto, en grupos de dos o tres, para formar un “interferómetro” gigante, el Inteferómetro Very Large Telescope de ESO, permitiendo a los astrónomos ver detalles 25 veces mejor que con telescopios individuales.
Fue por mucho tiempo uno de los observatorios más productivos del consorcio europeo, lugar que actualmente ocupa el VLT.
Ambos están dispuestos para obtener imágenes e información del universo de la más alta calidad.
A los pies del cerro Toco, a 5200 metros de altura, se encuentran los telescopios cosmológicos Atacama Cosmology Telescope (ACT), operado por la Universidad de Princeton; POLARBEAR (y su ampliación Simons Array), operado por la Universidad de California Berkeley; y Cosmology Large Angular Scale Surveyor (CLASS), operado por la Universidad Johns Hopkins.
La estación astronómica del cerro El Roble, está ubicada al este de Valparaíso.
Su instalación se realizó en 1965 gracias a un convenio de coparticipación entre Chile y la Unión Soviética.
[79] En Chile no se publica una revista científica profesional indexada en ISI relativa a astronomía o astrofísica.
No solo se redujo la contaminación lumínica de La Serena y Vicuña, sino que esto condujo a la creación del Observatorio Cerro Mamalluca[81] Como parte del esfuerzo continuado, se organizó un concurso para estudiantes secundarios, llamado proyecto "Educación de los cielos oscuros".
Se hizo como parte de la campaña mundial Globe at Night 2010, del NOAO.
El Proyecto incluyó capacitaciones con charlas y talleres temáticos donde han participado los profesores de aula (guías).
Finalmente, se contemplan actividades conjuntas con docentes y estudiantes de Tucson, Estados Unidos, sede del Observatorio Astronómico Óptico Nacional (NOAO).