Ejército Popular de la República

En octubre de 1936, el gobierno republicano procedió a reorganizar sus fuerzas armadas sobre la base de las unidades y cuadros militares que habían permanecido leales, al tiempo que refundía las milicias en unidades regulares del nuevo ejército.Otro elemento favorable a los sublevados fue que mientras los generales y altos mandos se mantuvieron mayoritariamente leales a la República, los jefes y oficiales intermedios se sumaron en buena parte a la sublevación y además si se considera la evolución durante la guerra el dato también es muy favorable para los sublevados, pues mientras durante ese tiempo la plantilla de jefe y oficiales del bando rebelde fue creciendo hasta alcanzar los 14.104 efectivos el 1 de abril de 1939, la del bando republicano fue disminuyendo hasta quedar reducida a 4.771, debido fundamentalmente al pase al bando rival de muchos jefes y oficiales en el transcurso de la guerra.Al producirse el cese del General Castelló, el coronel Hernández Sarabia pasó a ser el nuevo Ministro de la Guerra.La Armada Republicana estuvo obligada a operar con base en Málaga y Cartagena sin poder repostar en Gibraltar o Tánger ni impedir el puente aéreo que permitió el desplazamiento de las unidades sublevadas del Ejército de África a la península.En un principio se había asalariado a todo miliciano con diez pesetas mensuales, pero el Gobierno seguía sin tener control real sobre el Ejército, desvanecido tras el inicio de la guerra.[7]​ Los comisarios políticos tenían como misión dar moral a los soldados en todas las unidades y asegurar su cooperación con los oficiales de alto grado (en los que muchos milicianos republicanos no confiaban).También se organizarían las XI y XII Brigadas Internacionales con los combatientes voluntarios de todo el mundo entrenados en Albacete.Sólo la comida y el sueldo (que podían cobrar las familias de los combatientes en las ciudades) estaban casi asegurados.Luego las brigadas internacionales se retirarían, por orden de Juan Negrín, y los franquistas frenarían la ofensiva del Ebro.Otros formarían la resistencia antifranquista en las montañas de Toledo, Ciudad Real y los Pirineos, activa hasta los años 50, cuando acabaría desapareciendo.La organización del ejército se basó al principio mismo de su creación en las Brigadas Mixtas: Estas se componían de cuatro batallones (las cuales en un primer momento solían organizarse según sindicatos y partidos políticos ); A su vez, cada batallón estaba formado por varias compañías.
Bandera utilizada por el Ejército Popular Republicano durante la Batalla del Ebro .
Reproducción de la bandera de la 44ª división del Ejército Popular que se conserva en el Museo de la Guerra Civil en Tabar ( Navarra ). [ 8 ] ​ Esta unidad fue creada en mayo de 1937 y combatió en los frentes de Belchite , Aragón, Ebro , donde estuvo integrada en el XII Cuerpo de Ejército comandado por el teniente coronel Etelvino Vega , [ 9 ] ​ y la campaña de Cataluña.