[8] Evolucionó hasta volverse más deportivo, obteniendo como resultado las siglas que vienen de "Mid Engine" (Motor Central), Rear wheel drive (tracción trasera), 2 seater (biplaza).
Esta particular arquitectura tenía ventajas en la conducción, ya que se reducían las inercias en las curvas, disminuyendo las tendencias subviradoras y sobreviradoras.
Como se diseñó para acomodar un motor de 2 litros,[12] sus características principales incluyeron su carrocería ligera, tan baja como 2095 libras (950 kg) en Japón y 2350 libras (1066 kg) en los Estados Unidos, con un manejo fuerte y ligeramente motorizado, es decir, un motor de pequeña cilindrada.
La suspensión y la dirección fueron diseñadas con la ayuda del ingeniero Roger Becker de Lotus Cars.
También fue etiquetado con la leyenda "Supercharged" en la parte trasera y molduras detrás de ambas puertas.
Este modelo nunca fue ofrecido en los mercados europeos ni australianos, aunque algunos automóviles fueron importados de forma privada.
Sin embargo, muchos modelos japoneses se vendieron a través del mercado gris.
Las diferencias entre los modelos con aspiración normal y con turbocompresor incluían el emblema "Turbo" en Estados Unidos.
En la clasificación de récords personales, un Rev 2 GT-S pudo cronometrar 1:08.00 en ese mismo circuito.
Cuando se realizaban movimientos de dirección incorrectos para intentar corregir este sobreviraje sin encendido, la parte trasera del MR2 se balanceaba en una dirección y luego violentamente (y rápidamente) en la otra, de ahí el término sobreviraje "instantáneo".
En el entorno competitivo entonces densamente ocupado por biplazas a cielo abierto, este modelo era espartano y estaba diseñado para ofrecer el máximo dinamismo.
Detrás del volante, las personas altas tenían una buena posición para sentarse, como lo señalaron las pruebas de la prensa especializada.
El ligero techo de plástico se podía abrir directamente desde el asiento del conductor y, literalmente, lo convertía en un roadster simplemente perfecto.
[38] Se consideraba como la más manejable y divertida de conducir, gracias a poseer el mejor chasis, que le permitía un paso por curva muy eficaz.
También se beneficiaba de una suspensión deportiva y neumáticos grandes para un mayor agarre.
Si se deseaba exprimir su potencial deportivo, el piloto tenía que poseer buenos reflejos, con frecuentes contravolantes debido a la tendencia de deslizar la zaga, con constantes correcciones de la dirección, pero controlando con rapidez y precisión sus reacciones.
Sus frenos estaban a la altura del conjunto, con buena mordiente y dosificación, así como su elevada resistencia al calentamiento, dotado de discos en ambos ejes.
En la tercera, se transformó en un roadster y a la vez en el principal rival del Mazda MX-5 NB.
Aunque tenía un funcionamiento suave, no resultaba recomendable, pues lastraba tanto las prestaciones del motor como la experiencia de conducción.
Por otro lado, en 2003 llegó una reestilización en la que tanto la caja manual como la SMT, pasaron a tener seis marchas.
Como el motor no era demasiado potente, algunos clientes optaron por instalar el 2ZZGE de 1.8 litros VVTL-i con 192 CV (189 HP; 141 kW) que equipaba el Celica,[9] para así ofrecer más potencia y que cabía perfectamente en el vano trasero, justo por detrás del habitáculo.
Sin embargo, en Japón y el Reino Unido las ventas continuaban, aunque a una tasa más baja que cuando fue introducido en 1999.
De hecho, solamente se construyeron 100 unidades por Toyota Modelista International (TMI), vendidas únicamente en Japón en 2001.
[42] Se convirtió en un deportivo extremo cuando en Toyota Motorsport GmbH (TMG), con sede en Colonia (Alemania), empezó a experimentar sobre el modelo.
En la primavera de 2002, el MR2 Competition debutó con una pintura blanca y adhesivos laterales con la leyenda "Toyota Motorsport".
En el Campeonato Grand Touring, que más tarde pasó a ser el Super GT Japonés, el MR2 demostró sus cualidades dinámicas en comparación con los superdeportivos europeos.
[38] Toyota se asoció con BMW para revivir el Supra y también compartió los costes de desarrollo del GT86 con Subaru.