Guerra nuclear

Puede librarse en la tierra, el mar, el aire, el espacio e incluso en el subsuelo, a distintas escalas, con medios muy diferentes.

Entre estos, estaban Albert Einstein, Harold C. Urey, Linus Pauling y Leó Szilárd.

Debido a su enorme poder devastador, las armas nucleares son frecuentemente objeto de numerosos tratados y negociaciones internacionales y están sujetas a regímenes de vigilancia, protección e inspección especiales.

La patente le fue concedida, lo cual convierte a Leó Szilárd en el inventor de la bomba atómica.

Sin embargo, sólo Alemania y Estados Unidos estaban en condiciones de embarcarse en el proyecto con seriedad.

Ambas ciudades resultaron aniquiladas instantáneamente, con un saldo aproximado de entre 150 000 y 220 000 muertos,[8]​ la gran mayoría civiles.

El evidente poder que otorgaban estas armas inició una enorme carrera de armamentos entre las potencias que ya se adivinaban enfrentadas en la Guerra Fría, tanto con respecto a las armas atómicas en sí mismas como a los vectores de lanzamiento que permiten llevarlas hasta sus blancos y los medios técnicos y humanos extensivos, necesarios para operarlas eficazmente.

El primer misil balístico intercontinental verdadero fue el Cohete R-7 soviético (llamado en Occidente SS-6 Sapwood), una variante del mismo propulsor utilizado para lanzar el Sputnik, la primera nave espacial en órbita.

Por primera vez en la historia humana, era posible llevar la devastación más absoluta al corazón del enemigo.

Esto llevó a las fuerzas nucleares soviéticas al estado de máxima alerta durante semanas, mientras en Occidente se tenía una falsa impresión de tranquilidad, por lo que incluso un incidente menor podría haber disparado la respuesta nuclear.

Más relevantes fueron los Acuerdos SALT de los años 1970 entre las principales superpotencias, así como el Tratado INF.

Ambos limitaban el número de lanzadores y cabezas; este es el inicio en la práctica del desarme nuclear.

[25]​[26]​ Un arma nuclear es un explosivo de alta energía, que obtiene la misma mediante la fisión o fusión del núcleo atómico.

Una carga nuclear de potencia común, adecuadamente ubicada en las proximidades del blanco, desintegrará cualquier objetivo civil o militar y causará enormes daños y mortandad en los alrededores, incluso a kilómetros de distancia.

Así, entendemos las armas nucleares como un sistema integrado complejo, científico, industrial, militar y humano, que culmina cuando el blanco es alcanzado por una explosión nuclear.

Clasificándolas por estos lanzadores, pues, las armas nucleares suelen dividirse en:[29]​ Existen otros lanzadores posibles, prohibidos por tratado, como el sistema de bombardeo orbital fraccional (FOBS), desde satélites artificiales que pueden iniciar el ataque por sorpresa aproximándose por cualquier ángulo y trayectoria.

[41]​[42]​[43]​ Además, resulta relativamente sencillo modificar las armas atacantes y sus tácticas para dificultar enormemente su intercepción, a un coste muy inferior al de los sistemas antimisil que deberían detenerlas; esto es especialmente cierto para los misiles más sofisticados, usando técnicas especiales entre las que se encuentran: La acción combinada de todas estas técnicas y otras más esotéricas resulta en problemas insuperables para los sistemas antimisil de nuestro tiempo y del futuro próximo.

En un cierto momento de la Guerra Fría, existían armas para extinguir 23 veces a la especie humana.

En la actualidad sigue habiendo medios suficientes para matar a toda la Humanidad más de una vez.

Hipotéticamente, este derecho permitía detener radicalmente una invasión enemiga mediante el uso táctico de las armas nucleares en el propio territorio nacional, sin empezar una guerra termonuclear total.

Estos planes determinan unas listas de objetivos y estrategias básicos, que se pueden adaptar parcialmente al conflicto real.

Convencionalmente, se considera que existen cuatro niveles MAO:[53]​ Cotidianamente, las fuerzas nucleares otorgan a sus poseedores un elevado poder, una garantía última de seguridad en las circunstancias más excepcionales, y una capacidad diplomática superior.

En 2012 se estima que la cantidad total de armas nucleares existentes se encuentra aproximadamente entre 19 115 y 19 465 unidades, con el siguiente detalle: Puede observarse que Rusia —estado sucesor de la Unión Soviética— y los Estados Unidos siguen siendo, con diferencia, las principales superpotencias nucleares.

Entre ellos cabe citar a Arabia Saudita, Argentina, Australia, Brasil, Corea del Sur, Egipto, España, Irán, Irak, Libia, Polonia, Rumania, Sudáfrica, Suecia, Suiza, Taiwán y Yugoslavia.

Por el contrario, Bielorrusia, Kazajistán y Ucrania heredaron armas nucleares de la Unión Soviética pero se las devolvieron o revendieron a Rusia, normalmente para su desmantelamiento.

Además, algunos países europeos occidentales, así como Canadá, México, Colombia[65]​ y Japón, podrían disponer eventualmente de una fuerza nuclear si se lo propusieran pero no han manifestado su deseo y voluntad política de hacerlo.

En esencia, un arma nuclear es un explosivo extraordinariamente potente y muy contaminante capaz de causar gran devastación en un área determinada mediante las siguientes acciones combinadas:[36]​ Estos efectos discretos varían significativamente entre los ataques próximos al suelo (groundburst), destinados a destruir blancos altamente reforzados o muy resistentes, y las detonaciones en altitud (airburst), que pretenden maximizar el área de devastación contra objetivos blandos como ciudades o polígonos industriales.

Las detonaciones nucleares producen unas nubes características en forma de hongo, que pueden alcanzar tamaños enormes.

Esta percepción amarga y ominosa llegó a inspirar notables obras artísticas, como la película de animación británica Cuando el viento sopla (1986).

Con un carácter inmediato, se suelen realizar las siguientes recomendaciones:[66]​[67]​ La guerra atómica y sus preparativos no sólo tuvieron un gran impacto en la política, la diplomacia y la estrategia, sino que marcaron profundamente a varias generaciones a lo largo de toda la Guerra Fría.

A la izquierda el hongo atómico sobre Hiroshima (6/8/1945) y a la derecha el de Nagasaki (9/8/1945). Estas dos ciudades japonesas han sido las únicas en sufrir un ataque nuclear en la historia .
Antiguo ICBM del tipo Titán II , en servicio con la Fuerza Aérea de los Estados Unidos entre 1962 y 1986.
Explosión nuclear en Nagasaki (9 de agosto de 1945). Foto tomada desde uno de los B-29 que efectuaron el ataque.Bomba concebida por Szilárd.
R-7 8K72 Vostok exhibido en el Centro Panruso de Exposiciones , variante civil del primer misil balístico intercontinental .
Vehículo lanzador del ICBM ruso Tópol , Moscú, 2008.
Prueba de los vehículos de reentrada MIRV del cancelado ICBM estadounidense LGM-118A Peacekeeper , 8 disparados desde un solo misil (podía llevar 10). Cada traza indica el descenso de una cabeza de ataque, y cada una tenía una potencia comparable a 25 bombas como la de Hiroshima . En la actualidad, hay en servicio armas similares.
Pruebas para proteger un Boeing 747 de mando contra ataque de pulso electromagnético de gran altitud (HEMP). El HEMP tiene la capacidad de destruir todos los equipos eléctricos y electrónicos que carezcan de protección especial en miles de kilómetros a la redonda.
Mapa mundial con el estado de desarrollo nuclear representado por colores. Los cinco países con armas nucleares del Tratado de No Proliferación (NPT). Otros países con armas nucleares. Países sospechosos de tener armas nucleares o de estar en proceso de desarrollarlas. Países que alguna vez tuvieron armas nucleares o programas de desarrollo de armas nucleares. Otros países capaces de desarrollar armas nucleares en algunos años si así lo deciden.
Diámetro comparativo de las bolas de fuego de cinco bombas nucleares: la bomba del Zar (la más grande del mundo), de 4600 m de diámetro, la bomba Castle Bravo (la más grande de EE. UU.), de 2840 m de diám., la ojiva nuclear de un misil Minuteman (960 m), el misil Peacekeeper (640 m) y la bomba de Nagasaki (200 m)
Mapa hipotético de contaminación radiactiva a corto plazo tras un pequeño ataque nuclear contra las principales instalaciones militares de Estados Unidos. El área roja define las regiones donde esta deposición sería necesariamente mortal. En el medio plazo, los vientos arrastran mucho más lejos estas partículas, hasta que terminan contaminando todo el planeta.
Señal que indica la presencia de un refugio nuclear en Chinatown , Nueva York .