Tras su muerte, María Antonieta se convirtió en parte de la cultura popular[3] y en una figura histórica importante.[6] Cuando María Antonieta tenía 13 años, la emperatriz se interesó más por su educación con el fin de casarla.María Teresa I le pide entonces que nombre a un preceptor aceptado por la corona de Francia.En Francia el partido devoto, hostil por la caída de las alianzas llevada a cabo por el duque de Choiseul en favor del enemigo sempiterno, llama ya a la futura delfina «la austríaca», sobrenombre que le había sido dado por las princesas hijas del rey Luis XV.Su marido, tímido y reservado, la evita, por lo que el matrimonio no se consuma hasta julio de 1777.Ella trata de amoldarse al protocolo y a la ceremonia francesa, pero aborrece la corte fastuosa por el momento.Hay que reconocer, sin embargo, que ella ha hecho todo lo posible para favorecer al partido anti-austríaco, deponiendo de su cargo a D’Aiguillon y sustituyéndolo por Étienne François de Choiseul, pero todo había sido en vano.La reina, aunque inocente también, es tratada con gran desconsideración por el pueblo, al considerarla culpable, por lo menos moralmente.Todo es inútil, ya que las críticas continúan y la reina se gana el apodo de «Madame Déficit».Ya en proceso de desatarse la Revolución francesa, se difundió una frase que, supuestamente, habría pronunciado María Antonieta.Sin embargo, ya el filósofo contemporáneo suizo Jean-Jacques Rousseau confirma que la frase no fue proferida por ella, sino por otra reina anterior, María Teresa de Austria (esposa de Luis XIV); la frase original era «S'il ait aucun pain, donnez-leur la croûte au lieu du pâté» («Si no tienen pan, que les den el hojaldre en lugar del paté»).Conmocionada por este acontecimiento y desorientada por el cariz que toman los Estados Generales, María Antonieta se deja convencer por la idea de una contrarrevolución.Durante el trayecto se lanzan amenazas contra la reina e incluso le enseñan una cuerda, prometiéndole una farola en la capital para colgarla.Como monarca filósofo, le aconseja a su hermana que acepte los dictados de la nueva Constitución.Rápidamente París se da cuenta de la fuga, aunque La Fayette intenta hacer creer que el rey ha sido raptado por unos contrarrevolucionarios.Se producen unos momentos de nerviosismo, nadie sabe qué hacer y, durante este lapsus, la muchedumbre llega a Varennes.Por último, la familia real es amenazada y en medio de una situación muy violenta, es devuelta a París.Una hora y media más tarde, el palacio fue invadido por la multitud, la cual masacró a los guardias suizos.Al día siguiente, la familia real es transferida a la prisión del Temple en condiciones mucho más duras que las de su confinamiento previo en las Tullerías.Mientras que algunos abogaron por su muerte, otros propusieron intercambiar a ella por prisioneros de guerra franceses o por un rescate del Sacro Imperio Romano Germánico.Hasta su traslado desde la prisión, María Antonieta pasó largas horas intentando ver, infructuosamente, a su hijo.La celda tenía una estrecha y pequeña ventana que daba al jardín de las mujeres.Posteriormente, Luis XVIII hizo cerrar con una pared esta segunda celda y construir una capilla.[cita requerida] Para exagerar la acusación, Tinville hace declarar contra su madre al delfín, manipulado por sus guardianes revolucionarios.Los dos abogados de María Antonieta, Tronçon-Ducoudray y Chauveau-Lagarde, jóvenes e inexpertos, desconociendo el dossier, solo pueden leer, en voz alta, algunas notas que han podido redactar.4.- ¿Está convencida María Antonieta de haber participado en este complot y esta conspiración?Ella le dijo las que fueron sus últimas palabras en vida: «Disculpe, señor, no lo hice a propósito».Una carta grave y conmovedora, dirigida a su cuñada Madame Isabel, que la princesa real nunca recibiría, pues fue interceptada y entregada a Robespierre y estuvo desaparecida hasta el año 1816, cuando salió a la luz con motivo de la restauración borbónica en Francia (Luis XVIII): Muero dentro de la Religión Católica, Apostólica y Romana, en la religión de mis padres, en la cual fui educada y que siempre he practicado, no teniendo ningún consuelo espiritual, ni siquiera he buscado si hay aquí sacerdotes de esta religión, a los otros sacerdotes (constitucionales) si hay, no les diré mucho.Pido sinceramente perdón a Dios por todas las faltas que yo haya cometido en mi vida.Aquí, digo adiós a mis tías y a todos mis hermanos y hermanas, a mis amigos, la idea de estar separada para siempre y sus penas son uno de los más grandes dolores que les doy al morir, que ellos sepan, al menos, que justo hasta mi último momento yo pensaré en ellos.
María Antonieta interpreta a la novia, su hermano, el archiduque
Fernando
, al novio y su hermano, el archiduque
Maximiliano
, a Cupido. La ocasión de la obra se debió al casamiento de su hermano mayor,
José
, con la princesa
Josefa de Baviera
el 23 de enero de 1765.
María Antonieta cerca de 1767-1768.
María Antonieta en su época como Delfina de Francia (1772)
Diseño del collar de diamantes de la reina (Reconstrucción en zirconio, château de Breteuil.
María Antonieta con sus hijos.
Árbol genealógico de la familia real desde la época de Luis XV hasta los hijos de Luis XVI y los de Carlos X.
María Antonieta en 1788, poco antes de su derrocamiento.
Arresto de la familia real en la casa del registrador de pasaportes en Varennes, en la noche del 21 al 22 de junio de 1791 (por Thomas Falcon Marshall, 1854).
María Antonieta en la
Conciergerie
. Simon Gervais, siglo
XIX
María Antonieta frente al Tribunal Revolucionario. Grabado de Alphonse François a partir de una pintura de
Paul Delaroche
. 1857.