Su singularidad artística radica en los interiores de los palacios nazaríes, cuya decoración está entre las cumbres del arte andalusí, así como en su localización y adaptación, que generó un paisaje nuevo pero totalmente integrado con la naturaleza preexistente.
Existen más teorías para explicar el origen del nombre de la Alhambra, pues hay otros autores que arguyen que en la época andalusí la Alhambra estaba encalada y su color era blanco.
Este emplazamiento buscaba una situación estratégica defensiva y a la vez representar un claro símbolo, ya que la cima del poder es muy perceptible para el resto de la ciudad, una ubicación escogida para ser contemplada.
Las primeras referencias escritas de un emplazamiento militar en la zona datan del año 666.
En el 756 hay población árabe en los núcleos del Albaicín y la Alhambra.
La reconquista cristiana pasó a ser el impulso dominante dentro de la península.
Bajo los gobernantes Badis ben Habús y Abd Allah ibn Buluggin (1025-1090), la ciudad aumentó en población.
[cita requerida] Los edificios estaban concentrados en la colina de la Alcazaba y en su entorno inmediato.
Puede que haya habido otras construcciones puramente militares en la colina de la Alhambra durante el período zirí, pero es difícil distinguirlas con precisión.
La paradoja de la Granada nazarí consiste en el hecho de que un poder político y militar decadente, moribundo en realidad, coincidiera con una cultura original y sorprendentemente rica.
Ben-Al-Hamar construyó el primer núcleo del palacio, que posteriormente fortificó su hijo Muhammad II.
Con toda probabilidad, las murallas exteriores y el acueducto se completaron al final del siglo XIII.
Al sur del recinto, constituye la mayor de las torres-puertas nazarí y la principal desde el dominio cristiano.
Fue construida y abierta en 1348, bajo el reinado de Yusuf I.
[10] Cerca está la puerta de los Carros, único acceso rodado, vehículos autorizados a la medina.
Las primeras edificaciones hispano-árabes realizadas se corresponden con la época califal, en el siglo XI.
Sus elementos principales son: Avanzando de derecha a izquierda Construida entre 1238 y 1279, constituía la torre de defensa más grande del conjunto militar, por su altura domina toda la vega granadina.
[16][17] Frente más amplio del trapezoide que forma la alcazaba, con unos 75 m de altura.
Se cree que fue en esta torre donde instaló su residencia Al-Ahmar, el fundador de la Alhambra, cuando decidió construir su palacio.
Había tres calles principales, que unían y conectaban todas sus partes: La ciudad palatina de la Alhambra ha albergado un sinfín de palacios, palacetes, grandes casas y torres-palacios, que se han ido reformando o sustituyendo al querer cada sultán edificar, o al menos, redecorar, su propio palacio, ayudado por los frágiles materiales, que parecen seguir los preceptos islámicos de no construir nada que sea eterno.
[6] Toda la medina, especialmente su zona norte y exterior, cercana a los palacios nazaríes, contaba con palacios, muchos excavados, de personajes cercanos a la familia nazarí.
[25] Debe su nombre a la voz árabe que significa pórtico, y se refiere a los restos de la residencia del sultán Muhammad III, el más septentrional y más antiguo.
Ismail I inició la fase constructiva de palacios y dependencias reales.
Fue cedida por los Reyes Católicos a Mondéjar, siendo usado en sucesivo como residencia de los Alcaides de la Alhambra hasta que Felipe V en 1718 despojó del título a la familia por su apoyo al bando austriaco en la Guerra de Sucesión y el edificio fue derribado por Orden Real, aunque la leyenda afirma que fue el propio Conde.
Se trata de un palacete con bancos a la entrada para los eunucos, patio interior con alcobas, entrada en recodo, fuente en el centro, ventanas a los huertos de flor (en este caso, el Generalife), piso superior para las damas.
Fue demolido al año siguiente aunque se conserva la antigua capilla, obra nazarí reconvertida, en donde fueron enterrados los Reyes Católicos hasta la construcción de la Capilla Real de Granada.
La iniciativa para la construcción del palacio de Carlos V se inició en 1526, con motivo de la boda del emperador en Sevilla y su posterior traslado a Granada durante ese verano.
En algunos aspectos, repite o anticipa ciertas soluciones arquitectónicas del manierismo en Italia, lo que se explica por la estancia de Machuca en dicho país y por su habilidad para desarrollar con inventiva propia ciertos rasgos del incipiente estilo manierista.
[cita requerida] Sobre la puerta principal, se encuentran dos estatuas aladas de mujer reclinadas en el frontón.
Existen unas 10 000 inscripciones en la Alhambra, la mayoría de ellas poemas, sentencias, textos del Corán y jaculatorias.