[1] Aunque existieron hermandades de penitencia granadinas en los siglos XVI y XVII,[2] fue a comienzos del siglo XX cuando esta tradición se amplió y consolidó, aunque volvió a sufrir un profundo retroceso en los años setenta del pasado siglo.Las procesiones se extenderán en el siglo XVI con la Contrarreforma y también existirán algunas en el XVII.[4] Este renacer empezó en 1909 con la procesión del Santo Entierro Magno.En 1936 Federico García Lorca escribió una narración para Unión Radio sobre la Semana Santa en Granada.[5][6] Desde 1970 esta tradición sufre cierto declive, aunque se recuperará a partir de 1977.