Francisco de Aguirre

En la oportunidad el sumo pontífice, en agradecimiento, le indicó a Aguirre que podía pedirle alguna gracia.

[9]​ Entre Valdivia y Aguirre existía una manifiesta simpatía y estimación mutua, que llevaba a este último a considerar que debía entenderse directamente con Valdivia, sin mediación de ninguna otra autoridad.

Ellos entendían que si conquistaban a su costa las tierras que estaban entre los Andes y el Mar del Norte (Océano Atlántico) y fundaban algunas ciudades, y así se lo informaban al rey de España, el monarca les acordaría jurisdicción sobre ellas, uniendo de esa manera todas las tierras del Pacífico hasta el Atlántico en una sola gobernación.

En una segunda entrada, Aguirre alistó una compañía de setenta soldados muy bien pertrechados, con caballos, armamentos, pólvora, herrajes, etc.

También les requirió en forma obligatoria que debían reconocerlo por nuevo teniente de gobernador y justicia mayor.

La zona elegida se encontraba rodeada por un bosque y había alrededor de 86 000 indígenas (tonocotés) que Aguirre luego otorgó en encomiendas.

Cuando este murió, designó a otro sobrino, Rodrigo de Aguirre, que lo habían acompañado desde Chile.

[9]​ En mayo de 1554, Aguirre estimó necesario trasladarse hacia Chile para traer semillas, plantas, herramientas, labradores, etc.

En ese momento se reconciliaron los dos capitanes, que antes de su enfrentamiento habían sido amigos.

[9]​ Para esta designación el virrey tuvo en cuenta la petición de los cabildos y habitantes del Tucumán, por haberse rebelado en ella los naturales, matando a muchos españoles.

Aguirre conocía perfectamente a los indígenas del Tucumán y sabía cómo combatirlos.

Si bien Aguirre tenía 63 años de edad, evidentemente se sentía con vigor como para encarar este nuevo desafío.

Aguirre planificó pasar a Charcas y organizar allí su ejército antes de asumir la gobernación.

Para ello envió a su hijo Hernando, en el verano entre 1563 y 1564 con un puñado de hombres anticipando su llegada.

Como la situación en Chile era igualmente complicada y no le sería fácil conseguir allí soldados disponibles, Aguirre organizó un viaje a Charcas.

Ese viaje lo realizó acompañado con pocos soldados y en el camino fue atacado por los calchaquíes.

Milagrosamente fue salvado por un capitán con una partida de soldados que lo estaban esperando en esa zona.

Y cuando el sacerdote lo amenazó con la excomunión, le contestó: "que esas cosas para vosotros son temibles, pero no para mí".

Este grupo fue bien recibido por Aguirre ya que esperaba ansiosamente esos auxilios.

Habían caminado ya unas 60 leguas aproximadamente, cuando estalló un motín que echó por tierra todos sus planes.

Cuando los leales a Aguirre retomaron el control, los sublevados fueron procesados, condenados y ahorcados en la plaza principal.

Esta causa tuvo por objeto presentar a Aguirre como un energúmeno, enemigo de la religión, intolerante, intratable y cruel.

Esta interferencia de la Inquisición burló la resolución del virrey, que era quien lo había designado para el cargo.

Se labró un acta de esa abjuración, que firmó el propio Aguirre y las autoridades del Santo Oficio.

En su viaje de regreso, fue alcanzado por un sacerdote que le llevaba un mensaje del Santo Oficio.

Ante esa situación, el fraile regresó a toda velocidad hacia Lima para denunciarlo.

Aguirre regresó deseoso de vengar el ultraje que le habían inferido sus enemigos.

Si bien Gaspar de Medina le informó que los cabecillas del motín, Heredia y Berzocana, ya habían sido ajusticiados y muertos, Aguirre no quería dejar sin castigo a todos los que habían colaborado con ese motín.

Pero duró desde 1571 hasta 1575, no obstante se elevaron denuncias al rey de graves irregularidades en el proceso.

Al mismo tiempo crear pueblos defensivos en las sierras de Tucumán, en los valles Calchaquíes y Salta

Saqueo de Roma , el 6 de mayo de 1527.
Pedro de Valdivia , compañero de Aguirre en la conquista de Chile, por Madrazo .
Francisco de Villagra , por Pedro León Carmona. Aguirre disputó con él la gobernación de Chile.
Estatua de Francisco de Aguirre, obra de Roberto Delgado; Santiago del Estero , Argentina .
Busto de Francisco de Aguirre, por Roberto Delgado; Centro Cultural del Bicentenario de Santiago del Estero .
Francisco de Aguirre.
Monumento a Francisco de Aguirre, obra de Juan Adsuara en la avenida homónima , La Serena .
Ideología de Francisco de Aguirre (1551-1566).