Jorge no fue la primera opción del pueblo griego; tras el derrocamiento de Otón,[5] rechazaron al hermano del antiguo rey, Leopoldo de Baviera, su heredero presuntivo, aunque seguían prefiriendo una monarquía a una república.
Muchos griegos, buscando lazos más cercanos con la preeminente gran potencia, el Imperio británico, se agruparon en torno a Alfredo, duque de Edimburgo, segundo hijo de la reina Victoria y el príncipe Alberto.
[10] Finalmente, los griegos y las potencias imperiales dirigieron su elección hacia el príncipe Guillermo de Dinamarca.
[11] En su entronización en Copenhague, a la que asistió una delegación griega liderada por el almirante y primer ministro Konstantinos Kanaris, se anunció que el gobierno británico cedería a Grecia las islas Jónicas, en honor de su nuevo monarca.
[14] Políticamente, el nuevo rey dio pasos para concluir las prolongadas deliberaciones constitucionales de la Asamblea.
[20] Durante un viaje al Imperio ruso para encontrarse con su hermana Dagmar, que acababa de entrar a formar parte, por casamiento, de la familia imperial, Jorge conoció a la gran duquesa Olga Konstantínova Románova.
Sus hijos aprendieron inglés de sus cuidadoras y cuando se dirigía a ellos lo hacía mayoritariamente en esa lengua.
Desde 1864 hasta 1874, Grecia tuvo 21 gobiernos distintos, el más largo de los cuales duró solo un año y medio.
Si el rey insistiera, argumentó, en que solo podría ser elegido Primer ministro aquel que liderara una mayoría en el Vouli, los políticos serían forzados a trabajar más armoniosamente en aras de construir un gobierno de coalición.
Un plan como ese, escribió, terminaría con la inestabilidad política y reduciría el gran número de partidos pequeños.
[25] A lo largo de los años 1870, Grecia mantuvo la presión sobre el Imperio otomano buscando su expansión territorial hacia Epiro y Tesalia y la Guerra ruso-turca de 1877-1878 posibilitó la primera alianza para el reino heleno.
[27] Deligiannis movilizó a la Armada Helénica, lo que causó que la Royal Navy británica, comandada por Alfredo, duque de Edimburgo (quien fuera la primera opción de los griegos para ocupar el trono)[27] y el Primer Lord del Almirantazgo (en ese momento, Lord Ripon, cuyo cuñado había sido asesinado en Grecia 16 años antes)[28] pusiera en marcha el bloqueo de los puertos griegos.
Deligiannis fue forzado a desmovilizar la armada y Trikoupis retomó el control del gobierno.
[30] El deseo popular de unir a todos los griegos en un solo territorio (Μεγάλη Ιδέα, Gran Idea) nunca se desvaneció y estalló otra revuelta contra los turcos en Creta.
[31][32] Los griegos rechazaron una oferta otomana de autonomía administrativa y Deligiannis movilizó las tropas para la guerra.
Mientras los grandes imperios anunciaban un bloqueo, el ejército heleno cruzó la frontera macedonia y Abdul Hamid II declaró la guerra.
Miles de voluntarios se dirigieron al norte para unirse a las fuerzas bajo el mando del príncipe heredero Constantino.
Grecia estuvo así a cargo del control de Creta por primera vez en la historia moderna.
No obstante, Jorge dimitiría en 1906 tras una campaña en su contra por parte del líder parlamentario cretense Eleftherios Venizelos.
Finalmente, los militares implicados se unieron a Venizelos para convocar una Asamblea Nacional que revisara la constitución.
El rey Jorge cedió y se celebraron unas nuevas elecciones para la asamblea revisora.
Por su parte, el heredero Constantino fue repuesto como inspector general del Ejército[44] y, más tarde, comandante en jefe.
[48] Schinas fue torturado en prisión[49] y seis semanas más tarde murió al caer desde una ventana de la comisaría.