Teatro Eslava

A lo largo de su historia el Teatro Eslava ha contado con empresarios como Felipe Ducazcal,[4]​ Gregorio Martínez Sierra[5]​ o Luis Escobar, y estuvo cerrado en varias ocasiones.[8]​ Pero al parecer las veladas musicales no resultaban rentables y en 1873, Eslava alquiló el salón al empresario José Leyva, que integró el Granada en el cuerpo del teatro, adaptando el pequeño coliseo a los gustos del momento (los cafés-teatro para teatro por horas).Con el tiempo, café y salón se harían tan populares que el libreto de La Gran Vía —estrenada en 1886— lo inmortalizó en el cantable:[12]​ Leyva, decidido a convertir al Eslava en líder de la sicalipsis, barajando el "juguete cómico" con la "zarzuela ligera",[14]​ le robó al teatro de la Comedia a Ricardo Zamacois, el gran cómico del momento, y completó la compañía con Ramón Rosell y Antonio Riquelme.[18]​ El autor y empresario, que en esos días llegó a fundar un diario, La Noche, con Antonio Palomero como director, decide que es el momento de ampliar el aforo, se embarca en obras y gastos sin límite...La obra que abrió el ciclo fue El reino de Dios, un drama escrito por María Lejárraga, firmado por Martínez Sierra e interpretado por la Bárcena.Todo ello reforzado con la colaboración de músicos como Manuel de Falla, Conrado del Campo, Pablo Luna, María Rodrigo o Jacinto Guerrero y escenógrafos de nuevo cuño como Rafael Barradas, Manuel Fontanals y Sigfrido Burmann, el único que tenía experiencia anterior en escenografía, al haber trabajado con Max Reinhardt.No aceptó el empresario y se puso en escena la comedia de Vidal, con un rotundo fracaso, atribuido por el autor de Los gorriones del Prado al sabotaje promovido por Olmet, impaciente por estrenar su obra.[22]​ Al final, Alfonso Vidal y Planas, condenado a 12 años de cárcel, solo cumplió 3.En 1956 y tras una temporada en que fue cerrado por defectos de seguridad,[27]​, compró el viejo teatro del pasadizo de San Ginés el hasta entonces director del teatro María Guerrero (1939-1953), Luis Escobar.Con el dramaturgo, actor y marqués como dueño del local,[28]​ el Eslava recuperó sus momentos felices, con Nati Mistral como estrella rutilante.Chicas del Eslava fueron: Luisa Campos, Julia Fons, Carmen Andrés, Loreto Prado, Catalina Bárcena, Celia Gámez, Nati Mistral, Esperanza Roy, Concha Velasco, Norma Duval... y de alguna manera, anónima y singular, María de la O Lejárraga.[32]​ En la escalera que lleva al despacho del empresario Trapote, las paredes, cubiertas de fotos muestran una iconografía histórica del lugar a través de rostros de clientes como Rafael Alberti, Pedro Almodóvar, Julio Iglesias, Roger Moore, Enrique Múgica, Paco Rabanne, Enrique Tierno Galván o Stevie Wonder.
Proyecto de Fernández de los Ronderos en 1870, para la fachada del Teatro Eslava de Madrid. Museo Municipal de Madrid.
Julia Fons y el tenor González interpretando respectivamente a "Lota" y "El Casto José", en el estreno en el Eslava (1910).
Catalina Bárcena y Ricardo de la Vega en el primer acto de «La adúltera penitente», comedia del dramaturgo del siglo de Oro Agustín Moreto , adaptada por María Lejárraga , con ilustraciones musicales del maestro Turina , y estrenada en el Eslava. Fotografía de Kaulak , publicada en La Esfera (01-01-1917).
Los espectáculos mixtos del Teatro discoteca Joy Eslava.