La Argentinita

Su familia desarrolló un gran interés por el mundo del flamenco, lo que supuso el despegue artístico de Encarnación.

Con tan solo cuatro años, se inició en el mundo del baile junto a su instructora Julia Castelao.

Conjugaba el flamenco, el tango, las bulerías y los boleros, en una suerte de mezclas que resultaron una novedad en su época.

Entre los diez temas escogidos estaban coplas como Los cuatro muleros, Zorongo gitano, Anda Jaleo o En el Café de Chinitas.

Tras este trágico acontecimiento, la artista buscó refugio en el trabajo y se trasladó a Buenos Aires para bailar en el Teatro Colón, desde donde emprendió una larga gira americana con un amplio repertorio por casi todos los países del continente.

Además, también actuó en el Water Gate de Washington D. C. junto a su hermana Pilar López Júlvez, también reconocida como bailora y coreógrafa.

[3]​[4]​[5]​ La Argentinita fue autora de dos obras y partícipe en otras veintisiete junto a diversos artistas.

En el museo cordobés Julio Romero de Torres, se conserva un retrato dedicado a La Argentinita, ubicado en la sala número cuatro, llamada «El origen de lo hondo», que alberga obras cuyos temas principales son el flamenco y la copla.

Su arte castizo: su braceo y su colocación conservan en todo momento la pureza de la línea que no se descompone jamás con retorcimientos monstruosos o extravagantes: es arte, en fin, de solera española que se plasma en ritmo y melodía».

Retratada hacia 1916 en la portada de Mundo Gráfico
La Argentinita en 1924 (vestida de blanco a la derecha), junto con la reina Victoria y sus hijas Beatriz y Cristina, después del festival realizado en el hospital de heridos de la Guerra de Marruecos .
La Argentinita dibujada por Tito ( La Libertad , 1923)
Retrato de La Argentinita (1915), de Julio Romero de Torres .