Bando sublevado

Se estima que su fuerza de combate llegó a alcanzar durante la guerra una cifra cercana a un millón de hombres, entre militares, guardias civiles, requetés, falangistas y unidades enviadas por las dictaduras fascistas portuguesa, alemana e italiana.

[2]​ José Manuel Alonso Plaza considera que su uso es equívoco y prefiere los términos "faccioso" o "rebelde".

[6]​ Sin embargo, según Vicenç Navarro, durante la etapa democrática una corriente historiográfica calificada como «centrista» —representada por Javier Tusell— ha venido hablando de «bando nacional» (interpretación que seguiría estando «muy extendida en grandes fórums políticos y mediáticos del país»),[14]​ a pesar de ser considerado por otros autores un término propagandístico.

[6]​[17]​[20]​ Fuera de España, la clasificación como "fascista" se puede encontrar junto con "nacionalista" en un mismo texto[21]​ y aparece en publicaciones institucionales.

Falange Española fue una de las fuerzas políticas más activas contra la república, practicando el asesinato y el terrorismo.

[30]​ Se calcula que alrededor de 60 000 participaron en la guerra civil española, organizados en 41 tercios.

[33]​ Las dos potencias que se distinguieron por su apoyo a la causa franquista fueron la Alemania nazi y la Italia fascista.

Benito Mussolini envió a España al Corpo Truppe Volontarie y la Aviación Legionaria.

[36]​ La aviación legionaria italiana realizó 782 ataques aéreos en la costa mediterránea española controlada por los republicanos, lanzando 16.558 bombas.

Tras el conflicto militar, Franco consiguió unificar todas estas formaciones en un único partido, la Falange Española Tradicionalista y de las Juntas de Ofensiva Nacional Sindicalista, concebido como la rama política del denominado Movimiento Nacional.

Estos dos grupos se integraron en el bando rebelde y tuvieron desigual protagonismo en la guerra civil española.

[44]​ No obstante, la facción paramilitar carlista, los Requetés, tuvieron un importante papel en la guerra, distinguiéndose por su extrema violencia.

Sus partidarios se integraron en Renovación Española, un partido político monárquico fundado por los destacados alfonsinos Antonio Goicoechea y el Conde de Vallellano.

Los alfonsinos no se distinguieron por una importante actividad en este período, pero apoyaban a los diversos movimientos desestabilizadores que surgieron.

En beis, áreas controladas por los sublevados al inicio de la guerra. En rosa aparecen las zonas donde no triunfó la rebelión.
Cartel de propaganda del bando republicano en el que se muestran caricaturizados los integrantes del bando sublevado («Los nacionales»). Además del Ejército, la Iglesia y los «moros», aparece un capitalista con monóculo y la esvástica nazi .
Técnicos y militares alemanes junto a un bombardero Heinkel He 111 de la Legión Cóndor en 1938. La superioridad aérea otorgada a los sublevados por la llegada de la Luftwaffe sólo pudo ser contrarrestada por la República con la llegada de la aviación soviética .
José Antonio Primo de Rivera fue el fundador y líder de Falange Española . El protagonismo de esta formación en los disturbios sociales acontecidos durante la II República Española , mediante actos de intimidación, asesinatos y terrorismo, y su apoyo manifiesto al golpe de Estado del 18 de julio (aunque entonces se encontraba ya en la cárcel) fueron las razones esgrimidas por el gobierno republicano para su fusilamiento .
La Cruz de Borgoña , enseña tradicional de los ejércitos españoles, fue adoptada por los Carlistas como enseña propia, y utilizada por los Tercios de Requetés que combatieron en la guerra civil española .
Billete emitido por el bando sublevado en octubre de 1937 con el escudo de la monarquía de Alfonso XIII .