Madonna studies

[5]​ En otras definiciones, un numeroso grupo de autores, como lo son por nombrar algunos ejemplos: las profesoras Janice Radway y Suzanna Danuta Walters o la periodista Maureen Orth usaron las palabras «Madonnaology/Madonna-ology» para referirse a estos estudios.Es en esta línea que los Madonna studies se convirtieron en una especie de «industria académica artesanal» según Wolin.[8]​ La justificación o razón de estos estudios fue cuestionada por varios críticos teóricos y académicos entre otros profesionales.[17]​ La periodista estadounidense Anne Hull describió que los «Madonna studies son altamente especializados» en diversos temas.[30]​ Los profesores del libro American Icons (2006) explicaron que «no solo su trabajo, sino su persona estaba abierta a múltiples interpretaciones».[33]​ A veces, también es citado por varios expertos el ejemplo del autor Steven Anderson, quien en 1989 dijo: «[...] La resonancia de Madonna en la mente del público —nos guste o no— se ha convertido en un repositorio de todas nuestras ideas sobre la fama, dinero, sexo, feminismo, cultura pop, e incluso la muerte».[20]​ Tal como lo indicó la académica canadiense Karlene Faith: «Madonna ha sido objeto de estudios en muchas universidades».[44]​ La investigadora Joanne Garde-Hansen nombró a estos dos últimos libros; los escritos por Faith y Schwichtenberg, como «ejemplos fundacionales» en la atención académica suscitada hacía la intérprete.[37]​ El profesor Paul Rutherford mencionó más ejemplos como los ensayos de 1993, Deconstructing Madonna y Madonnarama.[45]​ El articulista Javier Ortiz habló sobre el libro que el profesor Robert Miklitsch escribió en 1998: From Hegel to Madonna: Towards a General Economy of Commodity Fetishism.[47]​ Probablemente es en los Estados Unidos donde se han impartido más clases sobre Madonna que en el resto del mundo, al menos durante los años de 1980.Mathew Donahue es por ejemplo, un docente que ha dado conferencias seguidas sobre ella en ese departamento en las clases de música y cultura según lo indicó The Plain Dealer en 2013.Los profesores se centraron en la dualidad de la intérprete vista como ícono feminista o una «chica material».[43]​[61]​ En 2015, diferentes profesionales como sexólogos, musicólogos y profesores impartieron la clase extensiva Who's That Girl?Madonna y la cultura pop contemporánea en la Universidad de Oviedo, siendo la primera artista femenina en recibir ese trato en la entidad educativa.[41]​ Fred Friendly, experto en periodismo y expresidente de CBS, planteó: «No puedo ver que ella tenga [algún] valor permanente en la sociedad».[41]​ Muchas críticas estuvieron dirigidas especialmente a Madonna, situación que se agudizó con el lanzamiento del libro Sex.Así lo sugiere Ouellette, quien encontró varios ejemplos con titulares y comentarios como: «Es una oportunista insípida que no merece la atención de estudios académicos», mientros otros dijeron: «El trabajo académico sobre Madonna, aunque se considera "serio", es en realidad una complicada enrevesada que tiene poca importancia social y no agrega nada al avance del conocimiento».Young, es otra defensora e hizo saber que este tipo de estudios no le parecía «nada inusual».[41]​ Sobre este tema, Young afirmó: «La gente asume que sobre ella no se habla en serio porque es un poco atrevida.[22]​ Con este preámbulo propuesto por Ouellette es necesario resaltar que existen diversos comentarios comparativos con otras corrientes de estudios, tanto en buen como en mal sentido.[71]​ En Australian Feminism: A Companion (1998), la historiadora del feminismo Barbara Caine indicó que tales estudios sobre la cantante eran ahora «considerablemente anticuados».[76]​ En otros comentarios, el profesor Thomas Ferraro dijo que los Madonna studies son como «el equivalente a los Cultural Studies Central en los años de 1990» y que a diferencia de los análisis sobre Sinatra, estos estudios especializados en la cantante han tenido una perspectiva «bastante académica en enfoque, lenguaje e ideología».[32]​ Por su parte, Jim McGuigan en el libro Guaraguao (2006) indicó que «en los estudios culturales el caso de Madonna ha sido tan excesivamente trabajado que se ha llegado al tedio, como ocurrió en las antiguas escuelas con el problema histórico sobre las causas de la Primera Guerra Mundial».[79]​ Por otro lado, el fenómeno de las contradicciones entre las revisiones y en Madonna misma, ha sido generalmente visto como una cualidad.[35]​ En 2018, Ana María Ospina de Radio Francia Internacional tras haber conversado con el profesor Eduardo Viñuela concluyó: «A contracorriente, la artista seguirá marcando la pauta, y para quienes la estudian como referente social, lo hará como siempre, a la vanguardia de su época».[88]​ En Encyclopedia of Women in Today's World, los autores coincidieron que estos estudios críticos sobre ella «la revelan como un símbolo, imagen y una marca».[89]​ Otros autores encontraron que ella tiene una posición única al resto de cantantes y celebridades en materia académica.Así lo demuestra por ejemplo, Elizabeth Tippens de Rolling Stone quien mencionó que «ninguna artista femenina se había infiltrado tanto» como ella en la academia.[50]​ En 1996, el bibliotecario y teólogo finés Tore Ahlbäck escribió que «casi ningún otro artista popular ha recibido tanta atención de la comunidad científica como Madonna».
Según la National Geographic : «La personalidad pública en constante evolución de Madonna inspiró un área de enfoque completamente nueva y totalmente controvertida en la cultura popular : los Madonna studies . [ 17 ]
Madonna se convirtió en la primera artista femenina en ser estudiada en la Universidad de Oviedo cuando en 2015, un grupo de profesionales de varias disciplinas realizaron el curso Who's That Girl? Madonna y la cultura pop contemporánea . [ 57 ]
Madonna ha sido descrita como una « Medusa moderna» [ 64 ] ​ en contextos académicos de una forma peyorativa. En la imagen , una representación artística de Madonna como Medusa ( Madonna Graffiti Medusa ).
Para muchos defensores, estudiar a la intérprete y desarrollar los Madonna studies era igual de importante como estudiar figuras de centurias pasadas como William Shakespeare ( imagen ).
Madonna vitruvio .
Para muchos expertos, el personaje de Madonna representa un paradigma de contradicciones y ambigüedades. Es algo que ha sido usado tanto en contra como a favor en los Madonna studies . En la imagen , una representación artística de Madonna al estilo mosaico .
Leer todo lo que se ha escrito sobre Madonna sería como «mapear la inmensidad del cosmos » según el erudito David Tetzlaff (ca. 1993 [ 10 ] ​). En la imagen una representación del cosmos.