El elemento crucial en la empresa pública es la capacidad del Estado para ejercer presión política directa en la compañía.En otro ámbito, debemos considerar la utilización de la empresa pública como instrumento a la disposición del Estado para corregir las asignaciones del mercado que, desde posiciones políticas diversas, pueden considerarse no equitativas o acordes con la elección social.No obstante, el cambio que se viene experimentando en esta materia es notable.Este modo de actuación es el que tradicionalmente viene a aplicarse al transporte colectivo.El riesgo más grave en que se incurre en este caso radica en que si no se especifica muy claramente la cuantía (implícita o explícita) de la subvención y quién y cómo va a satisfacerla, la cuantía del déficit puede hacerse absolutamente inmanejable, lo que afecta de forma definitiva también a la eficiencia tecnológica y de gestión.Como regla general se considera que las empresas públicas deben cubrir costes y obtener un resultado económico positivo.Los préstamos del Tesoro u otros organismos públicos a las empresas públicas tiene un uso más generalizado que las dotaciones de capital, siendo una modalidad de financiación prácticamente común a todos los países comunitarios.Para las public corporations británicas estos préstamos son desde 1956 el principal, casi único, medio de financiación externa.Los préstamos pueden ser otorgados directamente por el Tesoro o a través de otros organismos públicos (FDES en Francia, Cassa Depositi e Prestiti en Italia, etc.).Las subvenciones para borrar los déficit no son sino una forma de las varias que pueden adoptar las transferencias del Estado a las empresas públicas, y que se resumen en los tres grupos siguientes: En la financiación con cargo al mercado financiero debemos distinguir los recursos obtenidos por emisión de acciones, emisión de obligaciones y créditos.Para que el sector privado acuda a suscribir parte del capital de una empresa pública, esta deberá atenerse en su gestión a ciertas condiciones, lo que no ocurre para empresas de propiedad pública total.El aspecto más debatido en relación con las mismas es el de las ventajas concedidas a estos títulos para su aceptación en el mercado.Tales ventajas existen en casi todos los países y se presentan en forma muy variada: garantía estatal, bonificaciones impositivas, libres de comisiones, etc. Una empresa estatal o sociedad estatal es aquella que es propiedad del Estado, sea este nacional, municipal o de cualquier otro estrato administrativo, ya sea de un modo total o parcial.El Tratado de Maastricht incorporó la noción del mercado interior a derecho originario y reguló por primera vez la competencia en la UE así como las Ayudas Estatales.A mediados del siglo, con la llegada de Juan Domingo Perón al poder se produce un incremento en la presencia del estado en la economía, incluyendo no solo el sector de servicios públicos sino en esta oportunidad también la industria.[4] Existen también las sociedades de economía mixta (SEM) que son organismos autorizados por ley, constituidos como sociedades comerciales con aportes estatales y privados, y que desarrollan actividades comerciales o industriales regidas por el derecho privado.En 1937 se crea la Comisión Federal de Electricidad, la cual sigue vigente hasta la fecha.UU. tuvo lugar en esta década un proceso de privatización y desregulación.La historia de las empresas estatales en Uruguay se remontan a comienzos del siglo XX, durante los gobiernos de José Batlle y Ordóñez, donde el estado mediante un conjunto de reformas y leyes crearía empresas dedicadas a prestar servicios a la población, tales fueron la energía eléctrica, los seguros tanto personales como laborales y las comunicaciones.Posteriormente, durante la posguerra se nacionalizarian y crearían otros servicios e instituciones.En los años noventa el estado intentaría privatizar algunas empresas, pero un referéndum derogó dicha reforma.[14] En Venezuela las empresas públicas son compañías anónimas cuyas acciones en su totalidad o en parte considerable, pertenecen al Estado.Pueden ser un medio utilizado para permitir al Estado participar financieramente en una empresa privada, sin que esta llegue a cumplir misión de servicios públicos.