Real Casa de Correos

[1]​ Lo más conocido de su arquitectura es el reloj que existe en una torreta levantada sobre su tejado.

Este reloj centenario se hace protagonista una vez al año en la noche del 31 de diciembre debido a las campanadas que marcan el ritual de las doce uvas.

[3]​ Esta situación puede verse en la topografía de Madrid que hizo P. Teixeira en 1656.

La razón fue su actuación, al margen del monarca, para preparar en La Habana una flota dispuesta a asaltar las posesiones inglesas de Campeche y Belice.

En 1759, Ventura Rodríguez detalla un informe con indicaciones de qué materiales comprar y dónde resulta más asequible su logro.

Los vientos de cambio se hacían notar debido a las noticias que indicaban que el rey venía de Italia con el arquitecto Francesco Sabatini.

Carlos III empieza a emitir las Instrucciones que redacta Sabatini por orden real.

Su propuesta es opuesta, desde el punto de vista arquitectónico, a la del arquitecto madrileño.

El edificio que proyectó inicialmente Ventura poseía una planta rectangular, y el que modificó Marquet está organizado en torno a dos patios interiores separados por una crujía central y consta de cuatro fachadas.

El mismo arquitecto diseña en la vecina calle de Carretas la Imprenta Real que permitiría a la Puerta del Sol, y calles adyacentes, estar poblada de librerías.

El edificio no gustó a los madrileños desde sus primeros instantes y reunió las críticas negativas del pueblo, en especial por su distribución interior a base de muchos establecimientos estancos.

Muchas de las opiniones populares se centraban en la poca pericia del arquitecto francés (Marquet) que posiblemente la olvidara, otros mencionaban que la escalera no existía debido a una prohibición explícita de las autoridades.

El levantamiento popular acabaría con los fusilamientos del tres de mayo frente a la iglesia del Buen Suceso, incidente que dio lugar a la Guerra de la Independencia.

Tras las primeras refriegas muere el teniente general José de Canterac.

En 1842 es derribado San Felipe y en el solar adyacente, el acaudalado Santiago Alonso Cordero construye la Casa Cordero (segundo edificio en antigüedad en la actual Puerta del Sol), siendo la casa más moderna de la época (por ser de los primeros en poseer agua corriente).

En el año 1847 el inmueble fue ampliamente reorganizado en su interior para convertirlo en la sede del Ministerio de la Gobernación, aunque su planta baja sigue siendo utilizada como oficina central de Correos.

El segundo reloj, actual, obra del destacado relojero español José Rodríguez Losada, se colocó bajo una torrecilla que es inaugurada el 19 de noviembre de 1866.

[14]​ Estos relojes, debido a sus impredecibles retrasos, provocaron la ira de la gente.

En 1865 aparece el relojero José Rodríguez Losada como un salvador de la situación.

Rodríguez Losada vivía en Londres y había trabajado con la Armada Española haciendo instrumentos de precisión.

Su cuerpo es trasladado a las puertas de la Casa Correo, ya sin vida.

En ese mismo año el escritor Ramón Gómez de la Serna establece una tertulia literaria en una botillería adyacente denominada Café Pombo.

Ramón del Valle Inclán escribe una obra en 1928 titulada Luces de Bohemia, y parte de las situaciones (protagonizadas por Max Estrella) se producen en la Puerta del Sol y aledaños.

Al llegar a las puertas principales de Gobernación se encuentran con unos guardias civiles, que vacilantes no les permiten el paso.

En la época del franquismo (1936-1975) era imposible hacer manifestaciones delante del edificio y sus sótanos subterráneos albergaban prisiones, donde se detenía y se torturaba a miembros de la oposición clandestina al régimen.

[40]​ En 2009, aprovechando las obras de renovación de la Puerta del Sol, se reemplazó la placa que marca el kilómetro 0 que está incrustada en la acera frente al edificio.

Esta situación obligó al Gobierno regional a hacer una obra de rehabilitación.

La puerta principal que da al norte (sombreada a lo largo del día) posee un arco de medio punto.

En el tímpano del frontón triangular se puede ver un escudo real y dos leones rodeados de trofeos.

En la fachada, en el lado superior izquierdo junto a la cornisa, pueden verse unas inscripciones grabadas en dos piedras blancas.

La Puerta del Sol en 1830. Maqueta del ingeniero y cartógrafo militar León Gil de Palacio .
Real Casa de Correos en 1835 - Muerte de José de Canterac . Grabado de El Panorama Español
Revueltas populares durante la Vicalvarada en 1854. Por aquel entonces el edificio no contaba con el reloj en su parte superior. Grabado en La Ilustración .
A la derecha se puede ver el Edificio de Gobernación (tal y como se llamaba en el siglo XIX ). Fotografía de Juan Laurent ( ca. 1870).
Vista del edificio con iluminación nocturna en una ilustración de Salvador Azpiazu de comienzos del siglo XX ( La Ilustración Artística , 1905)
Vista desde el ángulo noreste.
Parte central de la fachada norte.
El reloj de la Casa de Correos, obra del relojero José Rodríguez Losada en 1866.