Fósil

El primero es un rico yacimiento del Pleistoceno donde se han encontrado, entre otros, abundantes fósiles de homínidos.

Los fósiles más antiguos son los estromatolitos, que consisten en rocas formadas por la precipitación y fijación de carbonato cálcico, merced a la actividad bacteriana.

[6]​ Esto último se ha podido saber gracias al estudio de los estromatolitos actuales, producidos por tapetes microbianos.

Los minerales son compuestos químicos, como la calcita (carbonato de calcio), que estaban disueltos en el agua.

La impresión que queda en la roca puede llenarse con otro material y formar una réplica exacta de la concha.

En otros casos, la concha se disuelve y tan solo queda el hueso en la piedra, una especie de molde que los paleontólogos pueden llenar con yeso para descubrir la forma del resto.

Los más espectaculares de estos "fósiles perfectos" son mamuts lanudos completos hallados en suelos congelados.

[8]​ La carne estaba tan congelada, que aún se podía comer después de 20 000 años.

Los restos posteriores (Neolítico, Edad de los Metales, etc.) suelen considerarse ordinariamente como subfósiles.

Los icnofósiles presentan características propias que los hacen identificables y permiten su clasificación como parataxones: icnogéneros e icnoespecies.

En los icnofósiles se pueden identificar varios tipos de comportamiento: filotaxia, fobotaxia, helicotaxia, homostrofia, reotaxia o tigmotaxia.

En el ámbar pueden encontrarse fósiles de insectos y otros pequeños animales que, en su momento, quedaron atrapados por la resina.

Esto hizo evidente que la distribución de carbono era diferente a todo lo visto en microfósiles auténticos y revelando su origen mineral.

Lingula es un braquiópodo actual del que se encuentran fósiles a través de todo el Cenozoico.

Cualquier investigación paleontológica debe tener en cuenta estos aspectos, para comprender qué se puede obtener a través del uso de los fósiles.

Las especies se extinguen y son reemplazadas por otras durante el curso del tiempo geológico.

En muchos casos los restos originales del organismo han sido completamente disueltos o destruidos.

Conservan un registro muy detallado de la actividad biológica del pasado y están relacionados con moléculas orgánicas actuales.

Las posibles fuentes de marcadores biológicos en muestras geológicas son tantas como moléculas se conocen en los organismos.

Un problema que se plantea muy frecuentemente es deducir cual ha sido la mineralogía original de grupos extintos (corales rugosos, arqueociátidos, estromatopóridos...).

Después del enterramiento el carbonato se altera en mayor o menor magnitud durante la diagénesis temprana.

El aragonito normalmente se transforma en calcita mediante uno de estos procesos principalmente: En general, los esqueletos fósiles que estaban constituidos por calcita mantienen frecuentemente esta composición original (a menos que se hayan silicificado o dolomitizado).

Los nódulos carbonatados están constituidos por siderita o calcita y asociados a sedimentos arcillosos ricos en microorganismos.

Su tamaño varía entre 10 y 30 centímetros aunque se han encontrado de hasta 10 metros (incluyendo un plesiosaurio completo).

En los tejidos blandos como músculos y también quitina, durante la diagénesis temprana se puede producir la piritización.

Algunos OH pueden ser reemplazados localmente, por iones de F-, sobre todo en dientes, produciendo un hidroxi-fluorapatito menos soluble.

Un ejemplo bien conocido son los coprolitos fosfatizados donde la propia materia orgánica es reemplazada por apatito que conserva la forma exacta del objeto.

Este ambiente se consigue fácilmente en medios con abundante materia orgánica, que es a su vez la principal fuente de fósforo.

La aplicación de esas técnicas conlleva nuevas observaciones que modifican a veces planteamientos previos.

Así, por ejemplo, tras una revisión realizada en 2006 con técnicas tomográficas de rayos X, se concluyó que la familia que contiene a los gusanos Markuelia tenía una gran afinidad con los gusanos priapúlidos, y es adyacente a la rama evolutiva de Priapulida, Nematoda y Arthropoda.

Esqueleto completo fosilizado del félido dientes de sable ( Smilodon fatalis )
Fósil de Charnia , el primer organismo complejo Precámbrico conocido; perteneciente a la biota del periodo Ediacárico .
Fósil de trilobites .
Fósil de ammonites .
Afloramiento con abundantes fósiles de gasterópodos y bivalvos (moldes internos), expuestos en la superficie del terreno por la erosión ( reelaborados ). Región de Puebla , México .
Tronco petrificado de Araucarioxylon arizonicum . Los materiales originales han sido sustituidos por otros minerales, sin perder la estructura.
Cruziana , icnogénero asociado a la interacción de los trilobites con un fondo marino sin consolidar (contramolde en la base de un estrato).
Microfósiles de sedimentos marinos.
Fósil de un insecto ( Leptofoenus pittfieldae ) conservado en ámbar.
Pseudofósil: dendritas de pirolusita . Crecimientos minerales que asemejan restos vegetales.
Muestra con hojas fósiles de un Ginkgo del Jurásico .
Molde en yeso de un Tarbosaurus en el Museo de Historia Natural de Westfalia ( Münster , Alemania ). El fósil original se encuentra en el Instituto Paleontológico de Moscú.
Concentración de artejos desarticulados de crinoideo ( Isocrinus nicoleti ).
Moldes externos de amonites .
Tronco de árbol fosilizado en Igea , La Rioja ( España ).
Insectos en ámbar.
Fósil de un Oviraptor .