Diego Mexía Felípez de Guzmán

Diego Mexía de Guzmán y Dávila (ca.

Después de fallecer este (1621), volvió a Madrid y gracias al apoyo de su primo y patrono Olivares, valido del rey Felipe IV, se convirtió en un hombre influyente y acaudalado.

Cooperó en la defensa de Castilla cuando parecía inminente el ataque inglés sobre Cádiz, y acompañó también al rey y a Olivares en su viaje a la Corona de Aragón.

Los tres debían cooperar para contrarrestar el desmoronamiento de la autoridad real en aquella región.

La presidencia del colectivo le incumbía a Aytona.

Suponía el gobierno efectivo de un ejército que tenía como misión principal garantizar el paso del cardenal infante Fernando a los Países Bajos, y recuperar las plazas alsacianas, que en esos momentos se encontraban en poder de los protestantes.

En el memorial que Leganés presentó en 1641, describiría el suceso con estas palabras:[2]​ Felipe IV le concedió la Grandeza de España en 1634, declarada perpetua en 1640.

Las tropas de Odoardo I Farnesio fueron derrotadas con facilidad, aviniéndose el duque a firmar la paz en 1637.

En ese mismo año desalojó a los franceses comandados por Rohan del paso de la Valtellina y obtuvo algunas victorias gracias a la guerra civil desatada en Saboya a la muerte del duque Víctor Amadeo I.

En 1638 Leganés conquistó las fortalezas de Breme y Vercelli.

Leganés se interesó también por la pintura de los primitivos flamencos, especialmente El Bosco, Rogier van der Weyden y Mabuse, y por los flamencos del siglo XVI como Antonio Moro o Quentin Massys.

También se encontraban obras de autores manieristas y barrocos como Bronzino, Giovanni Battista Crespi, Ludovico Cigoli, Guido Reni, Francesco del Cairo, Gaudenzio Ferrari, Giovanna Garzoni, Paris Bordone, Rosso Fiorentino y Scipione Gaetano.

Otros pintores contemporáneos como Francisco Collantes o Juan Fernández, el Labrador se mezclaban con autores de fines del siglo XVI, como Alonso Sánchez Coello, Juan Pantoja de la Cruz, Juan Fernández de Navarrete y El Greco.

El marqués de Leganés (a la izquierda a caballo) en La rendición de Juliers , obra de Jusepe Leonardo .
Libro delle gride (1645) por el Estado de Milán
La Batalla de Nördlingen , obra de Jacques Courtois .
Retrato ecuestre del marqués de Leganés por Gaspar de Crayer (1627-28), Museo de Historia del Arte de Viena .