Asedio de La Rochela

Los ingenieros reales aislaron la ciudad trazando 12 kilómetros de trincheras reforzadas por once fuertes y dieciocho reductos.

Además, Richelieu ordenó la construcción de un dique que cortara el acceso marítimo a la plaza.

Cuatro mil obreros lo levantaron a las órdenes del ingeniero Clément Matézeau sobre restos de navíos hundidos, y en el mismo se emplazaron cañones para hacer frente a los buques ingleses que intentaran acercarse.

Richelieu aceptó la proposición de crear una alianza franco-española contra sus enemigos comunes protestantes.

Desde allí marchó hasta las proximidades de La Rochela, en donde permaneció anclada sin llegar a participar en los combates.

La segunda, bombardeó las posiciones francesas en septiembre e intentó forzar el bloqueo, tras lo cual regresó a Inglaterra.

Esto, debido a la hambruna, las enfermedades y las muertes acaecidas en los encarnizados combates del sitio.

El 21 de agosto la última ciudad rebelde frente al rey, Montauban, se rendía.

El Cardenal Richelieu en el asedio de La Rochelle, Henri-Paul Motte , 1881.
El asedio de La Rochelle, Claudio de Lorena , 1631.