Combinación del exclusivo tren de rodadura del Nash Ambassador y de un chasis y una carrocería europeos hechos a mano, se convirtió en el primer automóvil deportivo introducido en los EE.
Donald Healey y el director ejecutivo de Nash-Kelvinator, George W. Mason, coincidieron en el RMS Queen Elizabeth, un transatlántico que realizaba la ruta entre Estados Unidos y Gran Bretaña.
[7] También clasificado como gran turismo por sus lujosos detalles, precio extremo y posicionamiento en el nivel superior del mercado, era lo suficientemente deportivo como para competir en varios circuitos de carreras.
En comparación con otros deportivos británicos contemporáneos, el motor del Nash-Healey era largo, pesado y voluminoso.
La suspensión delantera independiente, también Healey Silverstone, utilizaba muelles helicoidales, brazos de arrastre y barra estabilizadora.
[8] Incorporaba la calandra, el parachoques y otros adornos propios de Nash.
Donald Healey entregó la primera unidad a la cantante inglesa Petula Clark,[8] con el número de registro PET 1.
Los lados adquirieron distintas líneas de carácter desde los guardabarros, que terminaban con unas pequeñas aletas en la parte trasera.
[17] Reflejando su papel como producto de prestigio, los modelos Nash Ambassador y Statesman adoptaron una parrilla inspirada en la del Nash-Healey, con faros internos en 1955.
A su vez, la publicidad presentaba el nuevo Nash con un Nash-Healey de fondo para mostrar la obvia similitud.
[19] El motor Nash se amplió a 252 plg³ (4,1 L), produciendo 140 HP (104 kW; 142 CV) con carburadores Carter gemelos de fabricación estadounidense.
[20] El modelo del año 1953 vio la introducción de un nuevo cupé cerrado[21] junto al roadster (ahora denominado "convertible").
Aprovechando el tercer puesto en Le Mans de un Nash-Healey de carreras ligero construido especialmente para la carrera (véase más abajo), el nuevo modelo se denominó cupé "Le Mans".
[19] Algunos describieron el nuevo diseño como "magnífico",[23] aunque ciertas "personas mostraron su desinterés por los faros internos".
[28][29] Otro roadster aparecía en la película de 1954 Sabrina, protagonizada por Humphrey Bogart, William Holden y Audrey Hepburn.
Estos automóviles compitieron en cuatro carreras consecutivas de Le Mans y en unas Mille Miglia.
Por lo tanto, en cuestión de segundos, podía ajustar los frenos durante las paradas en boxes sin levantar el automóvil, una innovación que se decía que ahorraba hasta media hora en cada parada.
Su rendimiento alcanzó 13 mpg‑US (18 L/100 km; 16 mpg‑imp) y el motor no necesitó aceite ni agua durante las 24 horas completas.
"[38] El mismo año, Johnson corrió con el mismo coche en las Mille Miglia, la carrera italiana de mil millas de recorrido que sería prohibida por ser demasiado peligrosa cinco años después.
[41] En Le Mans 1953, la fábrica se asoció con Johnson y con Bert Hadley, con un coche con la carrocería rediseñada.
En 1956, American Motors presentó su primer motor V8, un propulsor de 250 plg³ (4,1 L) con válvulas en cabeza y un cigüeñal forjado, que rendía 190 HP (142 kW; 193 CV) cuando estaba equipado con el carburador estándar de 2 cuerpos.
No obstante, al Rambler Rebel se le atribuye el mérito de ser el primer muscle car producido en serie, y tan rápido como el Chrysler 300B, el Dodge D500, el Desoto Adventurer y todos los demás sedanes estadounidenses de 1957.
[46] En 1964, American Motors incluso adoptó el eslogan publicitario: "¿Por qué no introducimos los Rambler V-8 de alto rendimiento en las carreras?
American Motors no tendría un automóvil verdaderamente deportivo hasta el fastback Rambler Marlin de 1965.
Los Penske Javelin dominaron la serie Trans Am, derrotando a los Ford Mustang, Chevrolet Camaro, Plymouth Barracuda y otros pony cars.