Poco después de zarpar fue atacada por la flota holandesa bajo el mando del almirante Louis Boisot.
El encuentro se saldó con la derrota española, que hubo de volver a puerto con numerosas bajas.
Schot y Klaaf Klaafzoon eran los capitanes del buque insignia holandés.
La primera descarga de la artillería española dejó numerosas bajas entre los holandeses: Schot y Klaaf murieron y el almirante Boisot perdió un ojo;[2] los holandeses contraatacaron y aprovechando la estrechez del estuario en el que se encontraban, abordaron las naves españolas, entablándose una lucha cuerpo a cuerpo entre ambos bandos.
[3] Ante la noticia de la derrota de Romero, Sancho Dávila retrocedió hacia Amberes, con lo que los suministros que debían aprovisionar Middleburg nunca llegaron a su destino.