Asedio a Las Palmas de Gran Canaria

La intención de la flota era asestar un duro golpe a los españoles, cortando las comunicaciones entre España y sus territorios de ultramar, capturando cuantos barcos españoles se pusieran a su alcance.

Pieter van der Does atacó la costa norte española, siendo derrotado en La Coruña,[1]​ y luego en el sur en Sanlúcar de Barrameda.

Abandonó la península ibérica y se dirigió a las islas Canarias que fue avisada del ataque desde Amberes meses antes.

Se entabló un duelo entre la artillería de los navíos y los fuertes durante cinco horas.

[4]​ Unos 500 isleños se adentraron en el intrincado bosque del Monte Lentiscal para atraer a los holandeses los cuales siguieron tras ellos.