[9] A pesar de que posee similitud morfológica con los calderones (Globicephala) y la orca pigmea (Feresa attenuata) se encuentra más relacionada con el delfín del río Irawadi (Orcaella brevirostris).[38] Las poblaciones de orca en otras partes del mundo no han sido estudiadas con el detalle suficiente como para distinguir otros tipos.No obstante, parece haber similitudes con los tipos descritos al comparar los hábitos alimentarios y las características de la relación social que poseen.Sin embargo, los ejemplares jóvenes, cuando son observados de lejos, pueden ser confundidos con otros cetáceos como la falsa orca (Pseudorca crassidens) o el calderón gris (Grampus griseus).Es fácilmente distinguible por su gran tamaño que llega a alcanzar hasta un metro de longitud; no posee un pico u hocico identificable.[44] Todos los dientes tienen la misma forma (homodontos); son relativamente grandes llegando a los trece centímetros de longitud con las puntas ligeramente romas y curvadas hacia adentro.[13] Los alvéolos dentarios son profundos y los dientes presentan una forma oval al observarlos en un corte transversal a través de la base.[59] En aguas templadas y tropicales al oriente del Pacífico, los grupos están conformados por máximo 75 orcas con un promedio de 5,3 ejemplares.Las hembras que no han alcanzado la edad fértil y en ocasiones los machos, participan en el cuidado de las crías.[72] La comunicación vocal de las orcas está muy desarrollada y es un elemento esencial para permitir las complejas relaciones sociales que mantienen.Son usados principalmente para orientarse y localizar presas u otros objetos a su alrededor, pero los usan también con frecuencia durante las interacciones sociales dentro de las cuales pueden tener una función en la comunicación.[74] Los llamados modulados son las vocalizaciones emitidas con más frecuencia por esta especie; para el oído humano se asemejan a chirridos, chillidos y graznidos.[77] Las transeúntes, en cambio, son más silenciosas, probablemente para evitar alertar a los mamíferos que cazan, los cuales se caracterizan por poseer una excelente audición bajo el agua.Para cazarlos los persiguen desde aguas profundas atrapándolos justo en el momento que arriban a la costa, cuando la velocidad de los pingüinos disminuye drásticamente.Esta técnica es peligrosa para las orcas, debido a que si cometen un error en el rompiente pueden quedar varadas.Aquí las orcas no son animales residentes, su estancia en el estrecho coincide con la migración del atún rojo (Thunnus thynnus).[107] En las costas de Argentina, utilizan el varamiento intencional para capturar lobos y elefantes marinos cuando se encuentran cerca a la orilla del mar.[111] Otra técnica, documentada en la Antártida, consiste en arrojar al agua a las focas que descansan en pequeños icebergs o placas de hielo.[116] La especie posee el segundo cerebro más grande entre los cetáceos después del cachalote,[117] con un peso promedio de 5617 g.[118] Es un animal que puede ser entrenado fácilmente en cautiverio y es descrito con frecuencia como inteligente.Al menos quinientos individuos llegan anualmente y se desplazan en su mayoría de nuevo hacia el sur en enero cuando los arenques viajan para desovar.[2] Estos cetáceos pueden ser capturados accidentalmente durante las operaciones de pesca, pero se considera que esto es poco frecuente.Al sur de Brasil, donde sustraen atunes y peces espada (Xiphias gladius) pescados con palangre, la captura accidental se ha convertido en un problema.[128] Algunas poblaciones, como en Prince William Sound, Alaska, pueden haber sido reducidas sustancialmente debido a que los balleneros las disparaban en represalia.[133] Se ha documentado en esta especie la aparición de afecciones que comprometen diferentes sistemas, entre ellas, neoplasias, enfermedades infecciosas y vasculares.En el Atlántico Norte se capturaron 2435 ejemplares, en la Antártida 1681, en las costas del Japón 1534 y al este de la Unión Soviética 301.El encierro les produce a estos animales continuos trastornos en su salud, de tipo patológico (enfermedades) y psicológico (depresiones), así como alteraciones en su anatomía.Esto obedece al hecho que los animales viven confinados en estanques pequeños, donde pasan la mayor parte del tiempo en la superficie nadando en círculos, sin apenas sumergirse, dejando de someter la aleta a esfuerzos.[161] Este animal ya había estado involucrado en dos desenlaces fatales, incluida la muerte de un entrenador al que atacó junto a dos hembras en 1991.[162] Varios de estos ataques que involucran ejemplares en cautiverio, son ampliamente expuestos en el documental Blackfish (2013), dirigido por Gabriela Cowperthwaite.Aunque sobrevivió poco tiempo al cautiverio, para sorpresa de quienes lo vieron, el animal mostró gran docilidad y nunca intentó atacar a los humanos.
Aleta dorsal y mancha dorsal de una orca residente del noreste del
océano Pacífico
. Por la forma de la aleta, este ejemplar puede tratarse de una hembra adulta o un ejemplar joven de cualquier sexo.
Kshamenk
orca en cautiverio en
Mundo Marino
,
Argentina
, donde forma parte de un espectáculo. Véase la atrofia de la aleta dorsal, propia de los individuos cautivos.
Tilikum
durante una presentación en
SeaWorld
. Esta orca macho estuvo involucrada en la muerte de tres personas.
Orca tipo C que muestra un parche ocular inclinado y una capa, foto de R. Pitman, 20 de enero de 2002, 77°39'S, 165°54'E.