Esta fue la razón que llevó a las autoridades del virreinato y la república independiente a idear un sistema de desagüe que terminó por reducir el área de los lagos.Por su lado, la superficie del valle de Teotihuacán está formada por rocas sedimentarias.Al reducirse la extensión del lago, la fauna acuática y la vegetación también padecieron una reducción o desaparición en amplias zonas de la ribera, al grado de que en la actualidad los árboles de la familia Salix han dado paso a otros como el eucalipto, el pirul y los pinos, introducidos posteriormente.[12] Al mismo tiempo, la agricultura -que había sido durante mucho tiempo la actividad principal en localidades ribereñas como Atenco y Texcoco- ha venido decayendo, razón por la cual las extensiones sin cubierta vegetal se han ampliado.Entre estos primeros establecimientos se encuentran Tlatilco, Zacatenco y El Arbolillo, que pertenecen al actual estado de México.Además, algunos pobladores de Teotihuacán se refugiaron en antiguas poblaciones ribereñas del lago, como Azcapotzalco, Culhuacán, Chimalhuacán y Portezuelo.Venidos del norte eran los chichimecas, pueblos de filiación náhuatl, que al mezclarse con la población originaria, dieron lugar a la cultura tolteca en el siglo IX.Ejemplo de ello es Tenayuca, una población en el noroeste del lago habitada por chichimecas.[14] Las chinampas—o jardines flotantes, como les llamaron los sorprendidos españoles que llegaron al valle en el siglo XVI--, son una técnica agrícola que permite ganar al lago mayores extensiones de campo cultivable.La chinampa permitía una mayor eficiencia en la agricultura en comparación con otros sistemas de irrigación.La obra se realizó durante el gobierno del tlatoani tenochca Itzcóatl, entre 1440 y 1503.Por ello, los mexicas idearon la construcción de tres calzadas que unían la isla con las riberas del lago.La construcción dio inicio el mismo año, y concluyó doce meses después.Según un informe presentado por el virrey García Guerra, los egresos por la construcción del desagüe se elevaban en 1612 a 413 mil 324 pesos.Según esto, en Pantitlán (oriente de la actual Ciudad de México, antes Distrito Federal ) existía un resumidero cuya puerta solo podía ser abierta con una llave que, para mala suerte, solo los indios sabían dónde estaba.Sin embargo, los lagos de Texcoco, Xaltocan y Zumpango habían comenzado a reducir sus superficies, al ser desviado el río Cuautitlán de su desembocadura natural en Zumpango y ser desviado hacia el río Tula.Algunos de ellos eran Iztacalco, Santa Anita Zacatlamanco, San Juanico Nextipac y Mexicaltzingo.A la segunda mitad del siglo XX, la situación ambiental en el valle de México.Por otra parte, las obras del Drenaje Profundo también mostraban sus debilidades, puesto que en tanto que continuara el crecimiento demográfico y territorial de la ciudad, la cuestión del desagüe de la cuenca podría complicarse cada vez más.Por esta época, extensas áreas del viejo lago de Texcoco habían sido incorporadas a la zona urbana.Ya lo habían hecho los actuales territorios de Iztacalco, Benito Juárez y Venustiano Carranza.Comenzaba la colonización del oriente, especialmente en el enorme fraccionamiento llamado Ciudad Nezahualcóyotl, que en aquel tiempo pertenecía al municipio de Texcoco.En 1965 se instauró el Plan Texcoco, encabezado por los ingenieros Nabor Carrillo y Gerardo Cruickshank.Entre los argumentos esgrimidos a favor están la inutilidad agrícola del páramo texcocano, y desde luego, que una parte de los recursos financieros obtenidos por la operación del aeropuerto serían destinados al Proyecto Texcoco.La inconformidad con el precio que se pretendía pagar como indemnización, así como otras cuestiones de orden político, llevaron a varios de estos pueblos a levantarse en protesta contra el gobierno federal.Extensas porciones de lo que fue el lago son ocupadas hoy por asentamientos urbanos.En las tres primeras décadas del siglo XX, se crearon fraccionamientos urbanos al poniente y sur de la ciudad, que hoy forman parte de las delegaciones Cuauhtémoc, y Benito Juárez.En la década de 1940, ya se habían incorporado los territorios que actualmente pertenecen a las delegaciones Iztacalco y Venustiano Carranza.Sin embargo, el crecimiento demográfico alcanzó su época de apogeo durante la segunda mitad del siglo.Fue así como poco a poco quedaron incorporadas a la urbe numerosas poblaciones que antes habían sido independientes, como los pueblos de Iztapalapa al sureste, o Ecatepec al noreste.
La ribera del lago de Texcoco en los años 40, fotografía aérea tomada por el ingeniero
Ola Apenes
.
El sauce llorón (
Salix babylonica
) no era una especie común en la ribera texcocana, pero actualmente forma parte de la flora de las zonas húmedas del vaso de Texcoco. Un pariente suyo, el
ahuejote
, era empleado en la construcción de las chinampas.
La gallareta ha vuelto a las aguas de Texcoco, después de una larga ausencia provocada por la desaparición de extensas áreas del lago.
Cerámica de Tlatilco.
El lago de Texcoco a la llegada de los españoles.
Detalle de un mapa antiguo del
Valle de México
con el lago de Texcoco. En él, se observa la desaparición de la laguna de México, que rodeaba a la ciudad por el occidente.
El valle de México, en una pintura de José María Velasco. Entre los volcanes y la ciudad, se alcanza a ver el lago de Texcoco.
Vista Aérea del Lago de Texcoco en los años 40.
Mapa comparativo del área de la Ciudad de México y los antiguos lagos del valle.