[27] El teniente general británico Frederick E. Morgan fue nombrado jefe del Estado Mayor, Comandante Supremo Aliado (COSSAC), para trazar un plan detallado.
[39] Finalmente, fueron treinta y nueve las divisiones Aliadas que participaron en la batalla de Normandía: veintidós estadounidenses, doce británicas, tres canadienses, una polaca y una francesa, que sumaban un millón de soldados,[40] todos bajo mando británico.
Estas secciones de costa se dividieron a su vez en playas identificadas por los colores verde, rojo y blanco.
Durante las tres primeras semanas, crearían una zona segura e intentarían controlar todo el territorio conquistado al norte de la línea Avranches-Falaise, para permitir a los ejércitos aliados virar a la izquierda y avanzar hacia el río Sena.
[49] La flota de invasión, mandada por el almirante sir Bertram Ramsay, se dividió en la Fuerza Naval Occidental y la Oriental.
La primera, bajo el mando del almirante Alan G. Kirk, apoyaría los sectores estadounidenses y la segunda, dirigida por sir Philip Vian, a los anglocanadienses.
Para evitar dar pistas a los alemanes sobre el lugar del desembarco, los vuelos se prolongaron por toda la costa atlántica europea.
[60] Los puertos Mulberry se complementaron con varios barcos de bloqueo que debían ofrecer protección frente a la artillería enemiga.
[64] Los vehículos acorazados de los ingenieros reales británicos se modificaron para cumplir diversas funciones, como tender puentes y disparar cargas explosivas a gran distancia contra fortines enemigos.
[66] Sin embargo, estos vehículos demostraron hundirse con demasiada facilidad antes de llegar a la costa y muchos se perdieron durante las operaciones del Día D, especialmente en la playa Omaha.
[83] Para informar a los soldados de sus objetivos se les mostraron auténticos mapas del terreno con nombres modificados.
Además, a la mayoría no se le comunicaron sus destinos reales hasta que ya estaban cruzando el canal de la Mancha.
Se reunió con Eisenhower y otros comandantes en su cuartel general en Southwick House para discutir la situación.
[88][89] Los generales Montgomery y Walter Bedell Smith —jefe del Estado Mayor de Eisenhower— estaban ansiosos por comenzar la invasión.
El almirante Bertram Ramsay estaba dispuesto a zarpar, pero al mariscal del aire Trafford Leigh-Mallory le preocupaba que las condiciones atmosféricas fueran desfavorables para los aviones.
[112] El 4.º Batallón SAS de la Francia Libre, compuesto por 538 hombres, tenía asignados objetivos en Bretaña —operaciones Dingson y Samwest—.
Las tropas se toparon con poca resistencia del enemigo y sufrieron menos de doscientas bajas.
[117] Los puntos que alcanzaron tierra adentro estuvieron muy lejos de lo planeado, pero aun así avanzaron 6,4 km y contactaron con la 101.ª División Aerotransportada.
Tras soportar el fuego enemigo procedente de la parte alta, los soldados estadounidenses consiguieron ascender los acantilados con cuerdas y escalas, pero descubrieron que los cañones ya habían sido retirados.
[133] El desembarco en la playa Juno se retrasó a causa de la mar gruesa, y las tropas llegaron antes que los barcos de protección antiartillería, razón por la que el fuego enemigo ocasionó numerosas bajas entre los soldados mientras abandonaban las lanchas.
Gran parte del bombardeo naval había errado sus objetivos y muchas de las defensas alemanas permanecían intactas.
[134] Sin embargo, las fuerzas canadienses despejaron la playa con rapidez y crearon dos salidas hacia las poblaciones más próximas del interior.
Con el fuerte viento, la marea subió más rápido de lo previsto y complicó las maniobras para ubicar las protecciones antiartillería.
[145] Caen, un objetivo vital, seguía en manos alemanas al final del Día D y no fue capturada por completo hasta el 21 de julio.
[164] Al mismo tiempo, el 30 de julio, los británicos pusieron en marcha la operación Bluecoat para asegurar Vire y las alturas del monte Pinçon.
En tres días de combates, las brigadas 4.ª y 6.ª canadienses sufrieron numerosas bajas en sus enfrentamientos contra la Wehrmacht, en un terreno muy apto para la defensa.
Preocupado por un posible contraataque alemán y por los escasos suministros que llegaban a Francia, decidió continuar las operaciones en un frente más amplio en lugar de intentar penetrar profundamente en territorio enemigo.
[15] Durante la Segunda Guerra Mundial, perecieron en total unos setenta mil civiles en Francia,[15] sin contar las víctimas de las minas terrestres y las municiones no explotadas en Normandía en los años posteriores al final del conflicto.
[210] En el departamento de Calvados, al que pertenecen todas las playas del desembarco, 76 000 personas se quedaron sin hogar.
[211] Durante la Segunda Guerra Mundial, el saqueo fue una práctica habitual para ambos bandos, tanto alemanes como Aliados.