Operación Tigre

Uno de estos S-Boot era el S-130, que actualmente se encuentra en un dique seco en Plymouth.

El resto de los barcos y sus escoltas respondieron al fuego, consiguiendo que los S-Boot se retiraran del combate.

[6]​ De los dos buques asignados a la protección del convoy, solo el HMS Azalea se encontraba presente.

Cuando otros barcos británicos avistaron a los S-Boot enemigos de madrugada y avisaron a la corbeta, su comandante no advirtió del peligro al resto del convoy, asumiendo erróneamente que estos ya habían sido advertidos, cosa que no sucedió al encontrarse los LST y el cuartel de la Marina Británica operando en diferentes frecuencias de radio.

[2]​ Cuando los restantes LST arribaron a la playa de Slapton, los errores garrafales continuaron sucediéndose.

El crucero pesado británico HMS Hawkins batió la playa con munición real, siguiendo una orden del general Eisenhower, Comandante Supremo de las fuerzas aliadas.

«Sobre las playas había líneas blancas más allá de las cuales los soldados americanos no debían pasar hasta que el fuego artillero hubiera finalizado, pero los marines dijeron que ellos avanzaban sobre la línea blanca mientras eran reventados por las bombas».

Por ello, la invasión se declaró pospuesta hasta que fueron encontrados los cadáveres de todos estos oficiales.

[2]​ Existe poca información sobre cómo murieron exactamente todos estos soldados y marineros.

Varios testigos visuales detallaron el precipitado tratamiento dado a las víctimas, y la existencia de fosas comunes sin identificar en Devon Fields.

[8]​ Además, la historia fue detallada en los tres últimos libros al final de la guerra, incluyendo el artículo del capitán Harry C. Butcher, «Mis tres años con Eisenhower» (1946), y en muchas publicaciones y conferencias en los años siguientes.

Condado de Devon, en el suroeste de Inglaterra.
Un tanque tipo Sherman DD en el Torcross memorial .