Cañones de este calibre habían sido empleados por la Royal Navy desde finales del siglo XIX, por lo que la maquinaria necesaria para su fabricación estaba disponible.
[cita requerida] La producción se retrasó aún más por la derrota en la Batalla de Francia.
Tanto el Valentine como el Crusader tuvieron que retirar a un tripulante de la torreta.
El QF de 6 libras también fue instalado a bordo del automóvil blindado AEC Mark II.
Su meta era producir un cañón con las mismas dimensiones generales y peso del QF de 6 libras, pero con un mejor desempeño.
Siendo un cañón más pequeño y maniobrable, el QF de 6 libras continuó siendo empleado por el Ejército británico no solo durante la Segunda Guerra Mundial, sino también por unos 20 años después de la guerra.
En aquel entonces el Ejército estadounidense todavía prefería el Cañón M3 37 mm y la producción solamente fue planificada para el Lend-Lease.
La versión estadounidense, clasificada como estándar sustituto con la designación Cañón M1 57 mm, estaba basada en el QF de 6 libras Mk 2, del que se recibieron dos unidades desde el Reino Unido.
Pero como había suficientes tornos disponibles, la caña larga podía producirse desde el inicio.
El diseño y producción de proyectiles estadounidenses se habían quedado atrasados una vez que el cañón fue aceptado para servicio, por lo que al inicio solamente estaban disponibles proyectiles antiblindaje.
El cañón también fue empleado por las fuerzas de la Commonwealth, en formaciones similares a las británicas.
Sin embargo, durante el año siguiente los alemanes introdujeron tanques más pesados en servicio, principalmente el Tiger I y el Panther.
Luego fueron desplegados en el norte de África y en octubre 8 combatieron en El Alamein.
Por otro lado, el Comité de Armamento creía que se debía introducir un cañón más potente; la Caballería y las unidades aerotransportadas lo rechazaron.
Esto limitó la eficiencia del cañón en el papel de apoyo a la Infantería.
Además, Estados Unidos nunca desarrollo proyectiles APCR o APDS.
Pero con pocos tanques a los cuales enfrentarse, algunas unidades que debían ser equipadas con el cañón de 57 mm fueron desplegadas como compañías de cañones sin retroceso o solamente equipadas con bazucas.
Además de haber sido empleado por fuerzas estadounidenses, británicas y de la Commonwealth, el M1 fue suministrado a través del programa Lend-Lease a la Francia Libre (653), la Unión Soviética (400) y Brasil (57).
El cañón estadounidense M1 57 mm es popular entre los artilleros modernos, ya que hay un suministro relativamente bueno de vainas y proyectiles.
El Deacon y el cañón autopropulsado experimental Alecto Mk II también iban armados con el QF de 6 libras.
[7] El único vehículo armado con el M1 57 mm producido en serie fue el cañón autopropulsado T48, basado en el semioruga M3 (también conocido por la designación soviética SU-57).
La producción del T18 Boarhound fue detenida después de haberse construido 30 unidades.