Batalla del bosque de Teutoburgo

[7]​ Tras la conquista de la Galia por Julio César, los romanos ganaron una provincia con una larga frontera con los germanos,[8]​ pueblos belicosos que cruzaban constantemente para saquear el territorio fronterizo.Le acompañó en estas operaciones su legado, Saturnino,[24]​ y se construyó un cuartel invernal en el curso superior del río Lippe (Lupia), posiblemente en Anreppen.[47]​ Lo cierto es que los germanos se estaban acostumbrando a vivir junto con los avances de la cultura romana, especialmente al comercio, pero no habían olvidado su independencia ni costumbres ancestrales.[52]​ Es posible que con más tiempo, el cambio gradual hubiera permitido su integración completa, pero esta posibilidad se acabó con Varo.[70]​ Las legiones, a cargo del legado Gayo Numonio Vala, eran la XVII acantonada en Novaesium (Neuss), la XVIII en Castra Vetera (Xanten) y la XIX en Oppidum Ubiorum (Colonia).[82]​[86]​ Para esto compara con datos aportados por Tácito, quien dice que Germánico cruzó al este del Rin en el año 14 con 12 000 legionarios,[87]​ equivalentes a cuatro legiones según Wilms.[94]​ Debe mencionarse que las tribus no actuaban al unísono, por ejemplo, los queruscos estaban divididos entre partidarios y enemigos de Roma.[108]​ Durante la marcha se habrían dejado guarniciones en los fuertes temporales y cambiado las de los permanentes, hasta su relevo la próxima primavera.[111]​ El gobernador se entretuvo ese verano en tareas administrativas y legales, mediando en los conflictos entre germanos,[112]​ quienes afirmaban estar muy agradecidos de aquello.[114]​ Varo, creyendo todo pacificado,[111]​ empezó a desperdigar sus fuerzas en pequeños fuertes, persiguiendo bandidos y protegiendo caravanas de provisiones.[118]​ Así, en la mañana del 7 de septiembre, Varo ordenó levantar el campamento y formar a las tropas para pagarles su stipendium (sueldo).Desde su tribunal les dijo que irían a sofocar una pequeña revuelta antes de volver al Rin, prometiéndoles saquear las aldeas rebeldes, provocando vítores entre los legionarios.[134]​ En la madrugada siguiente, 8 de septiembre, los romanos levantaron el campamento temporal (castra) donde pasaron la noche y prosiguieron la marcha.[122]​ El lugar escogido era la Kalkrieser Berg, una colina al noroeste de la actual villa homónima y parte del macizo Wiehengebirge.[2]​ Para entonces, Arminio ya habría reunido a sus fieles queruscos y se dirigía al sitio, donde los angrivarios hacían los últimos preparativos.[150]​ Estudios del historiador estadounidense Peter S. Wells, basados en los descubrimientos arqueológicos, indican que los germanos bien pudieron arrojar una jabalina cada cuatro segundos, así que en los primeros veinte segundos del ataque cayeron 25 000 proyectiles sobre sus enemigos, matando unos 5000 e hiriendo o dejando agónicos a 10 000, quedando solamente unos pocos miles para seguir el combate, los cuales fueron eliminados en cerca de una hora de lucha cuerpo a cuerpo.[151]​ En cambio, Michael McNally cree posible que no fueran tantas armas arrojadizas como dicen las fuentes antiguas, sino ataques veloces con cuchillos y garrotes.[153]​ El ejército de Varo consiguió abrirse paso hasta un terreno abierto, donde construyó un campamento para guarecerse del mal clima y los enemigos.Los equipos para la construcción de un nuevo campamento fueron distribuidos entre las unidades, la artillería se abandonó pero sus ballestas fueron distribuidas entre los legionarios, probablemente los pilum estuvieran casi agotados, y se dieron armas al personal civil, sabedores todos que los germanos no harían distinción entre civiles y militares a la hora de atacar.Al final, solo quedó la retaguardia e inválidos en el campamento, estos últimos acompañados por algunos oficiales que pedirían misericordia a sus enemigos.[160]​ El ejército romano estaba mucho mejor formado pero igualmente sufrió fuertes bajas[155]​ ante los ataques germanos, aunque sus auxiliares pudieron lanzar pequeños contraataques.[163]​ Solo podían transmitirse las órdenes deteniendo a las tropas por la difícil coordinación de sus movimientos, era muy fácil que un mensajero se perdiera entre el caótico bosque (algo fatal) y la ubicación exacta del gobernador era desconocida.[168]​ La ruta más directa, al oeste, exigía volver a los bosques, donde el terreno estrecho les impediría luchar adecuadamente.[223]​ Entre tanto, Asprenate se había dedicado con su ejército a calmar la Galia y fue el primero en reforzar la frontera de la Germania Inferior con sus legiones.[232]​ Para evitar un nuevo desastre no se alejaron mucho del Rin y permanecieron en territorio enemigo hasta el otoño.[240]​ Estas campañas restauraron el prestigio militar del Imperio, aunque los números de las legiones aniquiladas no volvieron a ser utilizados.[259]​ En cuanto a la distribución política de la región no hubo grandes pérdidas, el dominio real romano solamente abarcaba lo que hoy son los Países Bajos y la costa de Baja Sajonia,[260]​ territorios que se irían recuperando y perdiendo hasta la caída definitiva del limes.Para el año siguiente la alianza estaría deshecha y Augusto habría comprendido que necesitaba una guarnición mayor en la zona.Es más, debían marchar con orden defensivo hasta encontrar un terreno adecuado para la construcción y todo en un área que no conocían.[273]​[274]​ Tras la caída del nazismo, la figura de Arminio, muy usada por esa ideología, sufrió cierto ostracismo y hoy es poco conocida por los alemanes.
Mapa de las expediciones romanas en Germania entre los años 3 a. C. y 6. En amarillo oscuro los territorios ya sometidos y en amarillo claro los conquistados por estas expediciones.
Mapa de la provincia de Germania en el año 9. El territorio sometido al Imperio está en amarillo. En rojo se puede apreciar el camino de retorno seguido por Varo.
El bosque de Teutoburgo en un día con niebla.
Mapa de la emboscada en el primer día. El canal que conecta el Rin con el Elba es una obra moderna que no existía en la Antigüedad; lo mismo se puede decir de la autopista representada en amarillo. Se puede apreciar la ciénaga al norte y la colina, las legiones marcharon al oeste de esta última hasta que empezaron a rodearla y tomar dirección al sudoeste.
En rojo continuo se observa la posición de la columna romana cuando se produjo el primer ataque; en rojo intermitente la ruta que debieron seguir los legionarios después del ataque: un grupo siguió el camino hasta un claro donde construyeron un campamento (cuadrado rojo) mientras que otros, desorientados, acabaron en la ciénaga, donde fueron aniquilados. En verde se pueden ver las posiciones germanas y en naranja el terraplén desde donde atacaron. En gris los senderos, el principal y el menor por donde se desviaron las legiones siguiendo a sus guías.
Cenotafio del centurión de la Legio XVIII Marco Celio, natural de Bononia ( Bolonia , Italia ), y de dos de sus libertos, fallecidos todos durante la batalla del bosque de Teotoburgo, erigido por su hermano en Castra Vetera ( Xanten , Alemania ), en el que se indica que si sus huesos se recuperasen, debían ser enterrados allí.
El bosque de Teutoburgo visto desde el Hermannsdenkmal.
Representación de Arminio volviendo triunfante con los queruscos.
Mapa de las campañas que realizó Tiberio para castigar a los germanos. En verde el territorio romano y las tribus sometidas a su autoridad, en rosado las tribus enemigas del Imperio y en amarillo las que se pusieron del lado de Roma.
Máscara ceremonial romana encontrada en el lugar de la batalla en la colina Kalkriese .
El Hermannsdenkmal , monumento levantado en memoria de Arminio ( Hermann ) en la parte sur del bosque de Teutoburgo.