Ampurdán es un exponente principal del que se puede considerar producto local y de proximidad.
A continuación se expone una selección de los productos locales más arraigados a la zona, con un alto interés gastronómico y que se pueden encontrar en los restaurantes, tiendas y mercados ampurdaneses.
La función de la picadura, básicamente, es ligar el plato (normalmente, guisados, cazuela) que se está elaborando.
La picadura más conocida es la que se hace con almendras, galleta o pan tostado, ajo y perejil.
Según explican los habitantes de los pueblos ampurdaneses a manera de tradición oral popular, estos dulces se llaman brunyols en contraposición a los buñuelos por la forma que tienen: los brunyols son buñuelos "mal hechos", es decir, no son redondos ni iguales entre ellos.
Son dulces que se toman en la merienda o flambejaos con ron a los postres.
Y en los últimos años, gracias a la inmigración, importando oferta de productos exóticos.