La especie ha sido introducida en Australia, Nueva Zelanda, América del Norte, Argentina, Sudáfrica y otros lugares.
Sin embargo, los mismos estorninos pintos pueden llegar a ser considerados plaga, cuando acaban con cultivos de frutas y desentierran brotes agrícolas.
También pueden representar una molestia cuando las bandadas pernoctan en cables o postes urbanos, por el volumen del ruido y de los excrementos que producen.
[8] Existen varias subespecies que varían clinalmente en tamaño y tono de colores del plumaje adulto.
[23] Esta adaptación –que consiste en un agrandamiento de los músculos transportadores responsables de abrir la mandíbula, y un cráneo más estrecho que permite que el ojo se mueva hacia adelante para mirar a lo largo del pico– está más desarrollada en el estornino pinto (junto a Sturnus unicolor y Sturnus cineraceus).
[24] Esta técnica consiste en insertar el pico en el suelo y abrirlo como un medio para encontrar presas u otros alimentos ocultos.
A corta distancia se puede observar que este último tiene plumas de la garganta más largas, un hecho particularmente notable cuando canta.
[26] Al acercarse la época de reproducción, los machos cantan constantemente, pero lo hacen con menos frecuencia después del emparejamiento.
Las hembras parecen preferir parejas con canciones complejas, tal vez porque eso indique una mayor experiencia o longevidad.
Una canción compleja también es un herramienta eficaz en la defensa de un territorio y para disuadir su invasión por machos menos experimentados.
[9] Existen varios métodos con los cuales los estorninos pintos obtienen su comida, pero por lo general se alimentan cerca del suelo, atrapando los insectos en la superficie o justo debajo de ella.
[41][42] Los machos cantan durante gran parte de la construcción, y más aún cuando una hembra se acerca a su nido.
Aunque los polluelos generalmente se crían por un macho y una hembra, de vez en cuando la pareja puede tener ayuda adicional.
[13] La incubación dura trece días, aunque el último huevo puesto puede tardar 24 horas más en salir del cascarón que el primero.
[27] Al igual que otros paseriformes, los padres mantienen el nido limpio y quitan los sacos fecales de los pollitos.
Un ave con un pico deformado estaba infestada por piojos Mallophaga, probablemente debido a su incapacidad de eliminar los parásitos.
Esta pulga no se halla en los Estados Unidos, ni siquiera en la población estadounidense del gorrión común.
[83] Por la década de 1920, el estornino pinto se había establecido en Victoria, Queensland y New South Wales, pero para entonces era considerado una plaga.
Las aves nativas no estaban acostumbradas a vivir en estrecha proximidad del hombre por lo que se introdujo el estornino pinto desde Europa para controlar las plagas.
Favorece las tierras regadas y está ausente en regiones con suelos tan secos que no puede probar o sondear para insectos.
[11] En la península ibérica comenzó a reproducirse en 1960, mientras que el rango del estornino negro se expandió hacia el norte desde la década de 1950.
En América del Norte, las aves afectadas incluyen páridos, trepadores, pájaros carpinteros, golondrinas purpúrea y otros hirundínidos.
Por ejemplo, en España la especie es considerada un alimento; se caza para fines comerciales y existe un período de veda.
En Francia la especie es clasificada como una plaga, y la temporada en la que se puede matarla cubre la mayor parte del año.
[103] El uso de técnicas no letales, tales como dispositivos visuales o auditivos para asustar las aves, sólo tienen un efecto temporal.
El etólogo austríaco Konrad Lorenz escribió sobre la especie en su libro King Solomon's Ring (El anillo del Rey Salomón) describiéndola como «perro de los pobres» y «algo que amar»,[114] porque los pichones se obtienen fácilmente en la naturaleza y tras una cuidadosa crianza manual, son fáciles de mantener como mascota.
Se pueden mantener varios pájaros en la misma jaula, y su curiosidad los hace fáciles de entrenar o estudiar.
En el Mabinogion, una obra literaria medieval galesa, Branwen domesticó un estornino pinto, «le enseñó palabras» y lo envió a través del mar de Irlanda, con un mensaje para sus hermanos, que luego navegaron de Gales a Irlanda para rescatarla.
El compositor Mozart tenía un estornino pinto como mascota que podía cantar parte de su Concierto para piano en sol mayor (KV.
Llegó a estar muy apegado al ave y organizó un funeral elaborado cuando la mascota murió tres años más tarde.