[5] Si bien los recursos naturales afectaron fuertemente el crecimiento económico pasado, actualmente su impacto en la variación del producto es limitado.
En períodos largos, incluso pequeñas tasas de crecimiento anual pueden tener un efecto significativo debido a su conjugación con otros factores.
Este análisis busca entender porque existen tasas muy dispares de crecimiento económico en algunas regiones del mundo.
Hasta finales del siglo XIX no existieron estadísticas suficientemente detalladas para calcular el crecimiento económico.
[cita requerida]Durante la Primera Guerra Mundial, la Gran Depresión de entreguerras y la Segunda Guerra Mundial el crecimiento se ralentizó algo, aunque siguió siendo alto con respecto a las tasas observadas antes del siglo XIX.
Tras el final de la última Guerra Mundial llegó la época dorada del crecimiento económico entre 1945 y 1970, con una expansión sin parangón histórico.
Históricamente el crecimiento antes del siglo XIX entre países ricos y pobres había sido más equilibrado.
El crecimiento del PIB por años fue muy bajo por lo que no se tomó a consideración en los pensadores de la época.
En la teoría del crecimiento económico exógeno destacan los modelos de Solow (1956),[9] Ramsey (1928),[10] Harrod-Domar (1939)[11] (1946)[12] y Kaldor.
En la teoría del crecimiento económico endógeno destacan los modelos de Romer (1986)[14] (1990),[15] Barro (1990),[16] Learning-by-doing (1962),[17] Uzawa-Lucas (1965)[18] (1988),[19] Shumpeter,[20] entre otros.
[cita requerida] Pepin luego se fue a Inglaterra, donde la Royal Society publicó varios artículos científicos que escribió describiendo su trabajo.
la innovación), a las externalidades, etc. North y Thomas (1973)[22] sostienen que la explicación fundamental en el crecimiento económico son las instituciones.
En los años noventa, John Williamson publicó el Consenso de Washington, que se sugirió a todos los países en desarrollo para lograr el crecimiento.
Una política de crecimiento sostenido requiere una reducción del riesgo, velando para que no ocurran graves crisis financieras.
Por último, obviamente los gobiernos necesitan respaldar reformas que eliminen o por lo menos reduzcan las restricciones al crecimiento.
[24][25] Jevons aseguraba en el siglo XIX que las fluctuaciones económicas se relacionaban con las manchas solares.
Hoy las teorías del crecimiento económico son muy diversas y destacan las que buscan la explicación en las instituciones.
Las diferencias institucionales se explicarían debido a rasgos culturales, geografía, latitud, ideología y/o accidentes históricos etc.
El sistema actual asocia este crecimiento con el progreso y bienestar, relación cuestionada habitualmente por los críticos del capitalismo.
Por lo tanto, al menos para este año (y la tendencia es creciente, pues en 2003 la huella ecológica mundial se estimó en 2.23), estuvimos sobre-consumiendo respecto de la capacidad del planeta; o lo que es lo mismo, estamos destruyendo los recursos a una velocidad superior a su ritmo de regeneración natural.
Este concepto no debe ser confundido con el de desarrollo sostenible, pues este último cree que sí sería posible continuar aumentando el crecimiento, a la par que se protegiese el medio ambiente.
Hay quien piensa que este argumento se puede aplicar incluso a las economías más desarrolladas.
Los economistas convencionales opinan que las economías avanzan gracias a los avances tecnológicos, por ejemplo: ahora tenemos ordenadores más rápidos que hace un año, pero no necesariamente un número mayor de ordenadores.