Teoría de Olduvai

[5]​[6]​ Por otro lado, existe una corriente de personas, como Richard Heinberg o Jared Diamond, que también creen en el colapso social, pero aún visualizan la posibilidad de escenarios más benevolentes en donde se puede dar el decrecimiento con continuidad del bienestar.

[4]​ La teoría argumenta que los primeros signos fiables del colapso probablemente consistan en una serie de apagones generalizados en el mundo desarrollado.

[22]​ Con la primera revolución industrial y el colonialismo, la población en el mundo occidental empezó a duplicarse a un ritmo un poco mayor de 100 años, siguiéndole poco después el resto del mundo, con 1550 millones de habitantes para el año 1900.

De este modo se puede ver un escenario apocalíptico donde la población se ralentizaría en 2012 debido al declive económico mundial súbito y alcanzaría un pico máximo en 2015 en torno a los 6900 millones de habitantes (véase sección de críticas), y jamás en la historia volvería a crecer a estos niveles, habiendo tantas muertes como nacimientos en un momento dado (1:1), aproximadamente hacia el año 2017 más o menos.

[15]​ Duncan compara el pronóstico de su teoría con la expuesta por Dennis Meadows en su libro «Los límites del crecimiento».

Este principio sostiene que la atractividad es la diferencia del nivel de vida material entre las distintas naciones.

El inmigrante nuevo, al llegar a esa sociedad, adopta el mismo estilo de vida consumista sobrecargando aún más ese sistema.

[4]​[30]​ Richard C. Duncan, atendiendo los hechos históricos que predice la teoría de Olduvai, propone una división en tres periodos consistentes en era preindustrial, industrial y posindustrial.

[1]​ En esta cronología ya se ha consumado la era preindustrial y la primera mitad de la era industrial.

[5]​ Es posible que antes de la gran mortandad final grandes naciones desarrolladas se disputasen los escasos recursos en una especie de Tercera Guerra Mundial, sin descartar escenarios parecidos a la solución final o la guerra nuclear.

Japón e India jugarían un papel importantísimo en tal guerra conforme definan su posición.

[5]​ Al final también podría existir una enorme cantidad de pequeños pueblos agrícolas que se disputasen los pocos lugares privilegiados, sobreviviendo sólo aquellos pueblos que la capacidad de carga terrestre permitiese.

El mismo Pedro A. Prieto especula que los escenarios bélicos parecidos a la tercera guerra mundial u otro tipo de conflictos bélicos desgastantes se darían con menos probabilidad si el colapso social es rápido,[5]​ tal y como el que la teoría de Olduvai predice.

La diferencia entre escenarios es que la mayoría de la población, contenida en las ciudades, muere de hambrunas en el colapso rápido, mientras tanto en el colapso lento el conflicto bélico se extendería hasta las áreas más seguras, abarcando desde grandes ciudades a pequeñas comunidades rurales aisladas.

[6]​ En el primer grupo, los pesimistas, se encuentra enmarcada la misma teoría de Olduvai de Duncan y otros trabajos como el die-off[42]​ o colapso catastrófico propuestos por David Price,[43]​ Reg Morrison[44]​ y Jay Hanson.

[6]​ Aquellos que predicen escenarios de colapsos lentos y benevolentes donde puede entrar aún la opción del decrecimiento con continuidad del bienestar se pueden encontrar el «camino próspero cuesta abajo» de Elizabeth y Howard T. Odum,[49]​ el fin de la suburbanización y el regreso a la ruralización propuesto por James Howard Kunstler,[50]​ las sociedades que aún pueden elegir salvarse o fracasar propuesto por Jared Diamond[7]​ y la opción del «apagado gradual» de Richard Heinberg.

[8]​[51]​ Heinberg, en su libro «Apagado: Opciones y acciones en un mundo después del carbón»,[8]​ propone los cuatro caminos posibles que pudiesen adoptar las naciones ante el agotamiento del carbón y el petróleo: Son visiones donde el colapso es tanto un resultado como un objetivo.

[52]​ Esta situación, según Theodore Roszak, evoca el dogma utópico del viejo programa ecologista que consiste en reducir, frenar, democratizar y descentralizar.

[53]​ Según Ernest García muchos de estos proponentes son científicos dedicados a áreas que van desde la disciplina ecologista a la geología, la informática, la bioquímica y la genética evolutiva, muy alejados del estudio de las ciencias sociales.

[6]​ Entre los movimientos utópicos recientes más palpables se encuentra el anarcoprimitivismo,[54]​ el ecologismo profundo y las tecno-utopías como el transhumanismo.

[58]​ Sin embargo, en los últimos tiempos se ha visto un descenso en el crecimiento de la población, aunque debido a la decisión cada vez más común de tener menos hijos o descartar la paternidad debido a factores culturales y sociales en lugar de las muertes ocasionadas por hambrunas y enfermedades mencionadas en la teoría.

[9]​ No obstante concluye que los principios más generales de la teoría como el cenit petrolero, la capacidad de carga terrestre y la vuelta a la utilización del carbón como fuente primaria son factibles en algún grado.

Entre sus publicaciones más polémicas se encuentra el libro «El Desembarco» del autor francés Jean Raspail (publicada en español por Plaza & Janés y en inglés por Charles Scribner's Sons)[63]​[64]​ ocasionando que The Social Contract Press haya sido descrita por el Southern Poverty Law Center como un «grupo de odio» que «publica una serie de obras racistas».

[67]​[68]​ Goncharov dice que todas las estimaciones del pico a la fecha se han equivocado, por lo tanto creer en el pico del petróleo es poco fiable y asegura que las compañías petroleras podrían buscar nuevos yacimientos abióticos.

[82]​ Mientras tanto, los anarcoprimitivistas y los ecologistas profundos ven este escenario catastrofista como un penoso camino al que nos lleva la civilización.

[54]​ Así pues, suelen ver el colapso civilizatorio como un resultado inevitable tanto como un objetivo a llegar.

También ha creado el Proyecto Venus en supuesta contraposición al modelo económico capitalista actual basado en el lucro monetario.

[83]​[90]​[91]​[92]​[nota 5]​ Los cornucopianos son libertarios que argumentan que el crecimiento poblacional, la escasez de recursos y su potencial contaminador son exageraciones o mentiras, como por ejemplo el cenit petrolero o el efecto ambiental devastador del carbón.

[11]​ Estas tesis consisten en los siguientes puntos: Los conservadores, los tradicionalistas y los nacionalistas enfocan sus posturas sólo al beneficio temporal desde el punto de vista etnocéntrico o antropocéntrico sin contar los efectos adversos al medio ambiente,[99]​[100]​[101]​[102]​[103]​[104]​ y no suelen negar abiertamente el cenit petrolero o la teoría de Olduvai, pero suelen omitir algunos puntos o toda la teoría como forma de negación institucional.

[nota 9]​ Algunas posturas y diversos países desarrollados han optado por la versión del calentamiento global no antropogénico o de origen solar viendo como una exageración las advertencias ecologistas.

Una curva de producción del petróleo, como sugirió originalmente M. King Hubbert en 1956.
Evolución del consumo mundial de carbón 1984-2004. Fuente: World Coal Institute. . [ 28 ]
Gráfica que muestra el nivel de consumo de energía de 1930 a 2005. En color verde, etapas de crecimiento; en color azul, etapas de estancamiento; en color rojo, etapas de declive. Fuente: Richard C. Duncan (2007), «The Olduvai Theory: Terminal Decline Imminent». [ 2 ]
Era preindustrial, industrial y postindustrial según la teoría de Olduvai. En color azul la era preindustrial al comienzo de la revolución neolítica , en color verde los hechos consumados de la era industrial (1765-2009), en color amarillo las predicciones de la teoría hasta el fin de la civilización industrial (2100) y en color rojo la era postindustrial. [ nota 3 ] Fuente: Richard C. Duncan (1996) «The Olduvai Theory:Sliding Towards a Post-Industrial Stone Age»; [ 1 ] Richard C. Duncan (2009) «The Olduvai Theory: Toward Re-Equalizing the World Standard of Livin». [ 4 ]
300px Informe de Naciones Unidas del año 2004 en donde se calculan estimaciones del desarrollo de la población mundial de 1800 al año 2100. [ 55 ]
Diversas estimaciones del pico del consumo del petróleo. Fuente: Freddy Hutter, TrendLines.ca. [ 65 ]
Esquema del consumo de energía en el año 2006 según la página de la EDRO. [ 69 ]
Consumo de energía per cápita a nivel mundial (línea gris) y desglosado en fuentes energéticas según TheOilDrum.com. [ 70 ] ​ Petróleo en verde, carbón en rojo, gas en azul, hidroeléctrica en café y nuclear en amarillo. Encerrados en círculos se ven aumentos del consumo que entran en contradicción con el postulado de Duncan.
Potencia empleada mundial, entre 1965 y 2013 según el departamento de energía estadounidense BP . [ 77 ] ​ Petróleo en color rojo, carbón en color negro, gas natural en celeste, nuclear en naranja, hidroeléctrica en azul.
Fuentes de energía renovables en el mundo en 2006. Fuente: Renewable Energy Policy Network for the 21st Century . [ 78 ]
Precios internacionales del barril de petróleo Brent de mayo de 1987 a marzo de 2009. Se observa la enorme burbuja que estalló en julio de 2008 cuyo 60 % fue atribuible, según afirmó la cámara de senado estadounidense, a la especulación . [ 93 ] [ 94 ] Fuente: Departamento de energía de Estados Unidos, Energy Information Administration .
Reactor Tokamak KSTAR de Corea del Sur que mediante una ingeniería toroidal planea circular plasma sumamente caliente para extraerle energía mediante fusión nuclear . Fuente de imagen: Michel Maccagnan.
Reparto de la producción de carbón bituminoso por países en 2007 Fuente: British Petroleum , Statistical Review of World Energy 2008. [ 77 ]