El precio del activo alcanza niveles absurdamente altos hasta que la burbuja acaba estallando (en inglés crack), debido al inicio de la venta masiva del activo cuando hay pocos compradores dispuestos a adquirirlo.
Pero además, el crash con el que finaliza la burbuja económica puede destruir una gran cantidad de riqueza y producir un malestar continuado, como ocurrió con la tulipomanía holandesa, la Gran Depresión de los años 1930 y la burbuja inmobiliaria en Japón en los años 1990.
[3] No obstante, las burbujas han sido observadas repetidamente en mercados experimentales, incluso con participantes sofisticados tales como gerentes y negociadores profesionales.
[5] Es más, se ha mostrado que las burbujas aparecen incluso cuando la especulación no es posible[4] o cuando está ausente el exceso de confianza.
Según el economista Charles P. Kindleberger, la estructura básica de una burbuja especulativa se puede dividir en 5 fases: