Cuatro tigres asiáticos

[1]​ Entre 1945 y 1990, en el contexto de la Guerra Fría, se les comenzó a ver como potencias.Las principales economías que se han desarrollado tan vertiginosamente —Corea del Sur, Hong Kong, Singapur y Taiwán— demostraron un crecimiento en calidad, cantidad y bajo precio en sus productos alcanzando mercados internacionales.Al haber mayor necesidad de trabajadores, estos obtuvieron una ventaja en la demanda, lo cual llevó a un aumento de salarios, y una mejora en el bienestar social que se sigue viendo hoy en día.En Singapur, las multinacionales ocupan un lugar fundamental que no se da en el resto de la región.Según esta hipótesis alternativa, los Estados Unidos habrían permitido y estimulado el desarrollo de los «cuatro tigres» con fuerte inversión monetaria, como un medio propagandístico para mostrar el éxito del capitalismo en contraste con otros países de la región dominados por el comunismo, en tanto que, a otros países del tercer mundo donde esa estrategia no era necesaria, Estados Unidos les habría impedido alcanzar ese nivel de desarrollo.Más adelante, comienzan a desarrollarse otros países del sudeste asiático, los llamados «tigres de segunda generación» o «pequeños dragones».Indonesia y Tailandia mejoraron la producción industrial, la agrícola, así como los ingresos provenientes del turismo.Estos aspectos son la otra cara de la moneda del éxito económico.Esto se debe a la inestabilidad que sufrió desde sus inicios como república independiente y a la dictadura de Ferdinand Marcos, que solo se preocupó por la autocracia en sí mismo, en vez de alentar el desarrollo económico, además, después de la dictadura, Filipinas sigue sufriendo por la delincuencia organizada y por la corrupción política.