En la batalla de Lepanto comandó el ala izquierda, la única en volver a Constantinopla.
De cualquier modo, Giovanni cayó prisionero y fue vendido a Cafer Rais, un corsario musulmán de origen calabrés - en ese entonces era común encontrar renegados mandando galeras corsarias- como él mismo.
[6] Como hombre libre, se hace contramaestre de la galera en la que empezó esclavizado, ahorra lo suficiente para comprar una participación en un bergantín, lo que le reporta beneficios, se casa con la hija de su antiguo amo Cafer Rais y finalmente, adquiere la patente para dedicarse al corso por su cuenta.
[9] En esta batalla coincide con Turgut Reis -más conocido por su apodo, Dragut-, según muchos el corsario más célebre del siglo XVI.
Estos le interceptan cerca de Los Gelves (Yerba), por lo que Uluj hace encallar su nave y la galera de mercantes catalanes que había apresado, escapando por tierra con todo el botín.
Una vez en Yerba, Uluj se ve bloqueado en el canal de Cantera por las galeras de Giovanni Andrea Doria, bloqueo del que consigue zafarse (imagen), dirigiéndose después a Constantinopla para pedir refuerzos.
Mientras tanto, en Constantinopla no habían perdido el tiempo, y a principios de mayo se presentó en Yerba una flota compuesta por unas 86 galeras y galeotas al mando de Pialí Bajá; esto toma de sorpresa a los cristianos, que no esperaban el ataque hasta enero del año siguiente.
[17][18] En menos de un mes —junio de 1560— Uluj Alí vuelve a azotar las costas ligures con 9 fustas, ataca Santo Stefano, Riva, Taggia y Rocccabruna, pero el golpe más importante lo da en Villafranca, donde los corsarios desembarcan, y se les enfrentan primero 25 arcabuceros a caballo y 30 hombres a pie, que son puesto en fuga.
En el enfrentamiento los saboyanos se llevan la peor parte, con 40 muertos y decenas de prisioneros destinados a la esclavitud.
Un mes después del ataque a Sóller, Uluj y sus hombres vuelven a las costas ligures con moderado éxito, pues varias villas quedan desiertas ante la incursión y San Remo está bien protegida con cañones.
[25] En junio parte del sitio hacia su habitual destino en Liguria (concretamente en lo que hoy es la provincia de Imperia), donde cosecha un éxito moderado, apresando varios barcos de transporte y esclavos, pero sin conseguir saquear plenamente ninguna población.
A mitad de julio, con San Elmo por fin conquistado, los esfuerzos de las fuerzas musulmanas se dirigieron hacia Birgu y el fuerte San Miguel, sobre el que Pialí Bajá dijo: Tan acertadas se demostraron las palabras de Pialí, que San Miguel y Birgu no llegaron a caer nunca.
Los malteses han resistido el primer gran ataque, al que seguirían otros dos con idéntico resultado.
[30] Hoy día Birgu es conocida como Città Vittoriosa -Ciudad Victoriosa- en reconocimiento a su papel en el sitio.
Mientras tanto, Uluj debe viajar a Trípoli llevando los restos de Dragut, pues las tropas acuarteladas en su nueva posesión se han amotinado.
[32] Un año después del Gran Sitio, Uluj hace campaña en el Tirreno con 5 galeras, con las que asola Córcega y Cerdeña, haciendo presa en el tráfico marítimo que parte de Livorno, puerto del Gran Ducado de Toscana.
[36] Nada más ascender al cargo, tuvo que hacer frente a importantes responsabilidades.
[37] Finalmente tuvo que ceder ante la presión y dejar marchar a quien quisiese ir en calidad de voluntario, pero prohibiendo la actividad mercenaria.
Uluj, no estando en posición de presentar batalla, se tragó el insulto.
Se envían 8 galeras y 400 arcabuceros, que en realidad no eran sino presos liberados con la promesa de combatir en las Alpujarras.
En un principio Uluj, según las fuentes, pudo temer algún tipo de emboscada, pero las informaciones del barco apresado en Pessaro le despejaron cualquier duda.
La flota musulmana se dirigió entonces a Licata cuidando de no ser vistos desde tierra y cuando llegaron a ver las 4 galeras, estas navegaban con ritmo calmado cuando descubrieron la emboscada, ya sin prácticamente margen de maniobra.
Los jenízaros se quedaron sin las pagas atrasadas, teniendo que recurrir al saqueo para subsistir.
A su flota se une la de Kara Ogia y conjuntamente intentan sin éxito saquear Epidauro.
Pasa por Chipre, donde se está ultimando el asedio otomano a Famagusta.
Cuando llega la retaguardia cristiana al rescate, algunas galeras han sido seriamente dañadas, hundidas o capturadas.
Pialí Bajá y Uluj Alí inmediatamente comenzaron a reconstruir la flota otomana.
[47] Encontró la flota cristiana anclada en una ensenada de Morea, pero su estrategia de intentar atraer al enemigo e infligir daño mediante repetidos ataques rápidos significó que nunca se materializó una batalla en toda regla porque la flota cristiana era demasiado cautelosa para quedar atrapada y rodeada.
[49] En 1576 atacó Calabria y en 1578 sofocó otro motín de los jenízaros en Argel que habían asesinado al árabe Ahmed.
[47] En 1585 sofocó revueltas en Siria y Líbano con la flota egipcia otomana con base en Alejandría.