Cangas del Narcea

Hasta los años 30 del siglo XX su topónimo era Cangas de Tineo, siendo el río Narcea el que le dio el nuevo nombre.

El clima cangués, al igual que el de su vecino occidental Ibias, destaca por su peculiaridad.

Todos estos rasgos climatológicos repercuten en la vegetación, por lo que la presencia del haya es signicativamente inferior al resto de la región.

El lobo fue abundante en el pasado y aún hoy es el responsable de eventuales ataques al ganado.

También hay una gran cantidad de mustélidos que habitan en los sotobosques y también en zonas cercanas a los ríos: tejón (melandru en asturiano), comadreja (muniella), marta (fuina), garduña (fuina), armiño (muniella), turón (furón), nutria (llóndriga) y un vivérrido: jineta (xeneta).

En las inmediaciones de los ríos pueden encontrarse aves como el mirlo acuático (páxaru d'augua) o el martín pescador.

Fue fundado por los condes Piñolo y Aldonza, pertenecientes a la más influyente nobleza asturiana, con una gran fortuna tanto en tierras como en dinero.

Una vez derrotado el reino suevo por los visigodos, dos de sus monarcas, Gundemaro y Sisebuto, acuñaron moneda, probablemente durante las campañas de pacificación del norte peninsular, en una ceca denominada pésicos, pueblo celta prerromano que habitaba esta zona y que se había romanizado parcialmente.

Sin embargo, hipótesis más recientes y habitualmente aceptadas identifican aquel lugar con Los Lodos, en el actual concejo de Grado, lo cual es más comprensible ya que por allí pasa el Camino Real del Puerto de la Mesa.

Los siglos XIV y XV están marcados por diferentes tipos de luchas, hasta caer el concejo en manos de la poderosa familia Quiñones, siendo restituido más tarde a la corona por Enrique III, pero aun así hubo diferentes enfrentamiento entre los corregidores mandados por la corona y la familia Quiñones, que ahora ostentaban el condado de Luna, que acaba en un pleito que se resolvió en 1553 a favor del rey, consiguiendo Cangas su autonomía, con jurisdicción ordinaria de realengo.

En el siglo XVIII hay que destacar una actividad antiseñorial por los abusos cometidos por la nobleza, mandando un memorándum al rey con todas las quejas.

La Guerra Civil no influyó en Cangas, pero sí la posguerra, ya que en estos lugares las partidas de guerrilleros republicanos se seguirían resistiendo.

Al inicio del siglo XX aumenta el número de emigrantes a Argentina.

La colectividad Canguesa crea en Buenos Aires el Centro Cangas del Narcea, que sigue existiendo hasta el día de hoy.

Actualmente Cangas del Narcea es el concejo de Asturias que más población pierde en términos absolutos.

Así, ha sufrido un éxodo rural pero no ha sido tan temprano como en el resto de Asturias ni con tanto ímpetu.

Este aumento ha permanecido incluso hasta el siglo XXI, llegando a contar con más de 9000 habitantes y convirtiéndose en la capital del suroccidente asturiano.

Por el contrario, las zonas rurales del concejo han ido perdiendo población progresivamente, fruto de una emigración que comenzó a mediados del siglo XX hacia diferentes destinos, tales como la República Argentina, Madrid o la zona central de Asturias.

Sin embargo, este descenso es significativamente menor que el experimentado en los valles mineros de la zona central asturiana en los últimos 20 años.

Cangas del Narcea es, junto con Navia, sin duda el principal motor económico del occidente asturiano, abarcando diversos subsectores económicos y siendo con creces el concejo que más puestos de trabajo genera y posee actualmente.

Es en la década de 1990 cuando la crisis provocada por la reconversión minera e industrial se hace notar en el concejo.

Sin embargo, la economía local consigue diversificarse hacia otros sectores, aunque la minería sigue jugando un papel importante en la misma, con la empresa Carbonar en Rengos.

También es cada vez más importante la afluencia de turistas que visitan el concejo gracias a sus atractivos culturales y ecológicos.

Llega el alumbrado público, las casas tienen acceso al agua corriente y se mejora la red de alcantarillado.

Para comunicar este barrio con la plaza de la iglesia se proyectó un puente peatonal sobre el río Narcea.

Además de este, se sitúan sobre el Narcea varios puentes más: Tiene gran cantidad de monumentos, repartidos entre iglesias, palacios, y casonas, entre las que destacaremos: Entre los palacios y casonas rurales se encuentran: Los monumentos más modernos son: Destacan dentro de la arquitectura tradicional del concejo las siguientes construcciones: Son instrumentos tradicionales en la zona el pandero, la gaita, la trompa y las castañuelas.

En el interior lleva unas "guitarras" (hechas con tripas de cerdo) y también piedrecitas, monedas o incluso garbanzos para potenciar el sonido.

Su exterior presenta un aspecto peculiar al utilizarse en su curación un aro de esparto que deja unas marcas muy características.

La uva se planta en espaldera, lejos del suelo, y en los lugares más empinados.

A partir del siglo XI los monjes benedictinos que se instalaron en Corias desarrollaron y extendieron el cultivo.

Palacio de Toreno , actual Ayuntamiento de Cangas del Narcea
Villa de Cangas
Río Muniellos
Azor en vuelo
Participantes del Rally Cangas del Narcea 2019 en el parque cerrado