Natacha Seseña

Una vez que Irún fue conquistada por los sublevados en septiembre de 1936, pudieron trasladarse a Calatayud, entorno familiar materno.

[cita requerida] Estimulada por Manuel de Terán, orienta su curiosidad innata hacia la cerámica popular, tema que más tarde expondría en su tesis doctoral, leída en 1970 y publicada cinco años después con el título de La cerámica popular en Castilla la Nueva.

[5]​ Interrumpe su carrera americana para regresar a España, y se instala en Madrid, ciudad en la que residió el resto de su vida.

Alumna del profesor Diego Angulo; colaboradora del etnógrafo alemán Rüdiger Vossen;[b]​ Natacha fue además asidua participante en las veladas organizadas por Juan Benet, donde estrechó su amistad con otros escritores, como los poetas Ángel González o Jaime Gil de Biedma, y donde supo mantenerse "simple dans ma vertu, forte dans mon devoir.

[cita requerida] (No incluidas las publicadas en periódicos y revistas generales (Cuadernos para el diálogo, Triunfo, El País...)

Las mozas del cántaro (1791), reúne tres constantes en la vida y la obra de Natacha Seseña: la alfarería, la mujer y Goya.