Los reyes ingleses, quiénes fueron de origen francés, tomaron esposas desde Francia desde el siglo XI al XV.
Muy raros son aquellos quienes se casaron con una mujer de otro país, incluyendo ramas cadete.
La guerra comenzó en 1159, cuando los ejércitos del Rey Angevino, Enrique II de Inglaterra, entraron en Périgueux.
Enrique II se retiró, anexando parte de Quercy y Cahors.
Dos hechos empañarían significativamente su reinado: El conflicto con su primer Canciller Tomás Becket.
Tras dos años de combate (1186-1188), una tregua fue firmada para mantener el statu quo.
La muerte de Enrique II en 1189 y la llamada a la Tercera Cruzada puso fin al conflicto.
Esperando adquirir la corona Inglesa con el apoyo del Rey de Francia, Juan sin Tierra pagó homenaje en 1193.
Forzado a permanecer en Corfú, fue capturado por el Duque Leopoldo V de Austria, quien lo puso en las manos del Emperador Alemán Enrique VI, su enemigo.
Entonces la lucha se reanudó, una vez más en ventaja de Ricardo quien invadió el Vexin (1197-1198).
Felipe Augusto apoyó esta rivalidad, y como él había tomado partido a favor de Juan contra Ricardo, esta vez toma partido a favor de Juan contra Arturo.
Las sospechas de Felipe tomaron forma cuando el conde empezó a reforzar Mortain, en Normandía occidental.
Al mismo tiempo, las primeras operaciones de las cruzadas albigenses, dirigidas por barones, vieron la pelea entre Raimundo VI, conde Toulouse y los defensores.
Entonces Felipe buscó más apoyo, particularmente con Enrique I, Duque de Brabante.
Los preparativos del conflicto persistieron: el proyecto inicial de Felipe, quien quería invadir Inglaterra, literalmente se hundió cuando su flota fue atacada por la coalición enemiga en Damme en mayo de 1213.
La estrategia funcionó al principio, puesto que Juan ganó apoyos entre los barones de Lemosín y Poitou.
En mayo de 1214, regresó al Valle del Loira y tomó Angers.
El joven príncipe se dirige inmediatamente a la fortaleza de la Roche-aux-Moines.
Juan entró en pánico ante su proximidad; el apoyo de los barones poitevinos vaciló, cuando se anunció que Luis estaba acompañado por 800 caballeros.
Pero la coalición aún no se había perdido: todo dependía del norte.
Ese domingo, la prohibición de lucha es absoluta para los cristianos, pero Otón decide iniciar la ofensiva, esperando sorprender a los enemigos mientras cruzaban el puente.
Los franceses del flanco derecho lucharon contra los caballeros flamencos dirigidos por Fernando.
La victoria fue completa en el continente, pero las ambiciones de Felipe no se detuvieron allí.
Así argumenta que Juan debería ser privado del trono, recordando su traición a Ricardo en 1194 y el asesinato de su sobrino Arturo.
El desembarco tomó lugar en mayo de 1216 y Luis, a la cabeza de las numerosas tropas (1200 caballeros más muchos rebeldes ingleses), conquistaron el reino inglés, incluyendo Londres, donde se estableció.
Pero es poco probable imaginar que él no hubiera dado su consentimiento para ella, al menos en privado.
Este testamento fue escrito mientras Felipe se encontraba en mal estado de salud y temía la muerte.
Su cuerpo fue llevado a París, y su funeral se organizó rápidamente, en Saint-Denis, en presencia de los grandes hombres del reino.
Luis VIII más tarde reclamó que la corte inglesa no había cumplido todas las condiciones del tratado de 1217.
Enrique III tenía en Francia solo Burdeos y Gascuña, que no serán atacados.