Madre del rey Luis IX de Francia, quien fue canonizado.
[1] La intención original era llevar como prometida del príncipe Luis a la infanta Urraca, hija mayor soltera de los reyes de Castilla, pero al final Leonor escogió a Blanca, su segunda nieta, ya que a su parecer, encajaría mejor en la corte de Francia.
Con apenas doce años la infanta Blanca se despidió de sus padres y hermanos y emprendió viaje con su abuela hacia Francia.
Blanca había sido una eficaz consejera de su marido.
[1] Blanca es considerada santa por la Iglesia católica al igual que su hijo san Luis.