Historia de Provenza

Los ligures autóctonos tuvieron relación con comerciantes etruscos y colonos griegos de Fócida.

Sin embargo, en la Baja Provenza, los celtas se mezclaron con los antiguos habitantes y terminaron por crear una nueva población de celtoligures.

Los celtoligures reagruparon a todas las tribus en una confederación, los saluvios, cuya capital era sin duda Entremont.

En el siglo I, Glanum poseía un verdadero centro monumental griego con un ágora rodeado de pórticos.

Los romanos, que acababan de pacificar Hispania, querían asegurar las rutas entre los Alpes y los Pirineos.

En el año 122 a. C., Cayo Sextio Calvino fundó al pie del oppidum de Entremont Aquae Sextiae y estableció una guarnición.

Sus descendientes hicieron carrera en Roma, muchos se convirtieron en caballeros y algunos llegaron hasta senadores.

Los magistrados municipales recibieron también, para ellos mismos y sus familias, el derecho a ser ciudadanos romanos.

37 colonias latinas fueron fundadas bajo el mandato de Augusto y los primeros emperadores.

la Provincia Narbonensis estaba gobernada por un Procónsul asistido por un Cuestor designados ambos por el Senado romano que tenían su residencia en Narbona.

El nuevo territorio ocupado entre las Galias e Italia se dividió en tres pequeñas provincias confiadas al gobierno de procuradores que tenían bajo su control cohortes militares.

La Narbonense no se escapa a las invasiones que asolan la Galia en el Siglo III.

El Siglo IV estuvo marcado por la conquista del poder de Constantino I, quien asedia Marsella en el año 309 donde se refugia el usurpador Maximiano.

[3]​ El Siglo IV se caracterizó también por las profundas reformas administrativas llevadas a cabo por Diocleciano y Constantino I, como la división de la Galia en cinco provincias.

A los Alpes marítimos se les unen los territorios de Digne-les-Bains y Embrun.

Ante el fracaso del sínodo de Roma, en 313, es Arlés la villa que acoge en 314 un nuevo concilio.

Una vez instalados al oeste del Ródano, realizaron incursiones en la otra orilla en los años 426, 452 y 458.

Por otro lado, los burgundios, instalados en Saboya desde el 443, conquistaron progresivamente Valence, Die, Embrun y llegaron hasta el río Durance en el 470.

[6]​ Más tarde, los burgundios ocuparon el sur de la Provenza a la muerte del visigodo Eurico en el año 483.

Amalasunta había mantenido la alianza con el Imperio bizantino y era prima de cuatro reyes francos, por lo que Teodato debe pagarles a estos últimos una multa (Wergeld) de cincuenta mil sueldos para evitar posibles represalias.

La villa es la sede de importantes obispos salidos del mundo monacal, como Honorato, Hilario y Aimé Césaire.

Los obispados se crean incluso en aglomeraciones que no son ciudades todavía como Tolón o Uzès.

Entre el siglo V y el IX, el territorio de Provenza se constituyó progresivamente integrado en reinos fluctuantes, ocupado pero muy poco germanizado.

A principios del siglo IX el reino franco conoció su máxima extensión, aunque duró muy poco tiempo.

En el año 879, la región fue incorporada a la Borgoña Cisjurana y, más tarde, integrada en el Reino de Arlés.

Este condado de Provenza corresponde casi exactamente al territorio ligur o griego original donde, progresivamente, se constituyó una lengua derivada del latín y una cultura propia.

Felipe III de Francia finalmente lo cedió, en 1274, al Papa y el marquesado pasó a llamarse Condado Venaissin.

Esta dinastía acumuló rápidamente títulos reales como Nápoles, Sicilia, Jerusalén, Chipre, Acre, Tesalónica, Hungría y Bosnia.

[14]​ Este proceso es, a menudo, presentado de forma simplificada como la integración al dominio real.

Sin embargo, según la ley, la Provenza fue independiente y continuó siéndolo hasta la Revolución francesa.

La historia de la Provenza está ligada a su posición geográfica
Mapa de las tribus galas de Provenza.
Mapa de los tres feudos provenzales en 1125
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