Fausto de Riez
La misma fuente sostiene que fue bautizado y educado por san Germán de Auxerre, quien visitó la isla en 429.Fausto sostuvo, además, que el alma humana así como la de los ángeles eran, en cierto sentido, corporales, pues ocupaban un lugar material.[7] Sus cartas conservadas son diez, incluidas cinco dirigidas a Ruricio de Limoges.La oposición a Fausto no se desarrolló totalmente durante su vida, muriendo con una merecida fama de santidad, motivo por el cual es venerado como santo.Fulgencio de Ruspe, escribió un tratado titulado Contra Faustum Reiensem libri septem.