Carlos III de Nápoles

Intentando unir fuerzas, el rey Carlos I Roberto de Hungría y Roberto I de Nápoles unieron en matrimonio a sus hijos, pero Juana, la hija del rey napolitano, consiguió ser coronada ella sola en Nápoles y que Andrés, el hijo del rey húngaro, fuese asesinado.

Pronto por intervención papal la custodia de Carlos pasó a manos del rey húngaro Luis el Grande en 1365, y el joven príncipe fue llevado a Visegrado, donde ganó muchos simpatizantes en la corte húngara.

Tanto el rey de Francia como Juana I de Nápoles apoyaban al antipapa Clemente VII que vivía en Aviñón, por lo cual las relaciones entre la reina y el pontífice romano cada vez estaban más decadentes.

[1]​[2]​ Carlos tomó Nápoles y apresó a la reina Juana, siendo estrangulada al poco tiempo.

Fue coronado e investido por el papa Urbano VI como Carlos III de Nápoles en 1382, y estableció su corte en suelo ítalo, llevando su familia desde Hungría.

Carlos contraatacó sitiando a Urbano VI en Nocera, propiedad de su sobrino y adonde había huido el papa.

El partido que apoyaba a la reina viuda Isabel y a su hija María decidió deshacerse de Carlos, y una noche fue atacado por Blas Forgách el copero real, bajo órdenes del noble Nicolás Garai, cercano colaborador de la reina.

Urbano VI es sitiado por el ejército de Carlos III de Nápoles. Crónicas de Giovanni Sercambi