Templo de Jerusalén

Según la Biblia, se trataba del único santuario legítimo del pueblo israelita y contenía en su interior el Arca de la Alianza, un altar de oro, candelabros del mismo metal, una mesa con panes sagrados y demás utensilios empleados para llevar a cabo el culto de Yahweh.

[3]​ Su construcción marcó una ruptura con la tradición hebrea según la cual Yahweh moraba en una tienda, el tabernáculo, y no en una casa.

En el reinado de Antíoco IV Epífanes fue profanado, convirtiéndose en un templo helenístico posiblemente consagrado al dios Zeus.

Tras la revuelta macabea, fue purificado y vuelto a consagrar al culto de Yahveh por Judas Macabeo en 165 a. C.[5]​ A finales del siglo I a. C., fue ampliado y reconstruido por el rey Herodes, convirtiéndose en el punto focal del judaísmo.

En la primera guerra judía, fue sitiado por los romanos y destruido por las legiones al mando de Tito en el año 70.

La Biblia relata la construcción del Templo en el Primer Libro de los Reyes, capítulo 6 y en forma paralela, con algunas variantes, en el Segundo Libro de las Crónicas, capítulos 3 y 4.

Después de la dedicación, la divinidad le reveló a Salomón, en un sueño que Dios escucharía a su pueblo mientras este cumpliera el pacto de no adorar otros dioses y respetar la Torá.

El Templo propiamente dicho, según la descripción de la Biblia, era un edificio orientado sobre un eje longitudinal en dirección este-oeste.

A ambos lados de la entrada del templo fueron erigidas dos columnas, llamadas Jaquín y Boaz.

La tercera cámara, denominada Dvir o Kodesh Ha-Kodashím era el lugar más sagrado del Templo de Salmón .

En este patio interior podían entrar los peregrinos y las masas de fieles, pero el Santuario del Templo solo era accesible a los sacerdotes y el monarca de turno.

Con todo, fue rededicado bajo sus condiciones originales durante los reinados de Ezequías y Josías.

Hasta 2011 se creía que una granada de marfil, muy pequeña y con una inscripción en caracteres paleohebreos donde se lee: "[Perteneciente] al Templo de [Yahvé]h, consagrado a los sacerdotes", era un resto de los utensilios del Templo, pero hoy se sabe que si bien la granada es un objeto antiguo, la inscripción es una falsificación reciente.

[1] Luego del retorno del cautiverio y con el liderazgo de Zorobabel se hicieron los arreglos necesarios para reorganizar el desolado Reino de Judá y reconstruir su Templo, desaparecido para ese entonces hacía ya siete décadas.

[22]​ El grupo recién llegado constaba de 42.360 personas judías, incluyendo niños, junto a sus 7.337 sirvientes y 200 músicos (Esdras 2:65).

Había completado el largo y lúgubre retorno a casa desde las riberas del Éufrates hasta Jerusalén.

Dicha gente estaba animada por un fuerte impulso religioso y una de sus primeras preocupaciones fue restaurar su antigua casa de adoración, reconstruyendo el Templo y restituyendo sus rituales.

La gente aportó además su parte al tesoro sagrado y lo hizo con gran entusiasmo (Esdras 2).

Este acto tuvo importancia para el pueblo hebreo, dando además lugar a no pocos recuerdos (Zacarías 4:10).

Luego Esmerdis ocupó el trono por cerca de siete u ocho meses.

El Segundo Templo se diferenciaba de su predecesor porque presentaba árboles en su patio y poseía además un área reservada para los gentiles.

La Roca Fundacional es reverenciada por numerosos monoteístas como el lugar donde Abraham iba a sacrificar a su hijo;[30]​ sobre dicha formación pétrea se ubicaba el recinto más sagrado del Templo de Salomón; y en ese mismo sitio, siglos después de la destrucción del Templo y según sostiene la tradición islámica, el profeta Mahoma ascendió a los cielos, siendo portado por buraq, caballo alado con cabeza humana que allí lo condujo en una "travesía nocturna".

[31]​ Presenta asimismo la Roca Fundacional una importante impronta que, según la tradición islámica, fue hecha por Buraq al ascender a los cielos o, según otra versión islámica, el arcángel Gabriel grabó en la Roca la mencionada impronta.

Según una leyenda islámica, el día del Juicio Final se tenderá una cerda de caballo desde las "balanzas" al Monte de los Olivos y todos los resucitados deberán pasar por sobre ella: quien haya cometido injusticias caerá a la perdición eterna.

Imágenes organizadas en secuencia lógica de los hechos bíblicos que representan (y no según cuándo fueron realizadas).

Maqueta del Segundo Templo de Jerusalén en el siglo I a. C.
Indumentaria sacerdotal, Menorá (candelabro de siete brazos), Arca de la Alianza y demás utensilios del Templo de Jerusalén.
Reconstrucción informática del Templo de Salomón (2010).
Reconstrucción de los recintos del Templo de Salomón. De derecha a izquierda: Vestíbulo (blanco), Santo (verde claro), Santo de los Santos (rosado). Encyclopaedia Biblica , 1903.
Sección longitudinal del Templo de Salomón.
Fragmento de vidrio con el Templo de Salomón, siglo III . Nótense los dos pilares exentos. Encyclopaedia Biblica , 1903.
Representación artística, de la Dedicación del Templo por Salomón. (Acuarela de James Tissot c. 1896-1902)
Inscripción incisa en la granada de marfil..
Plano general del Templo de Jerusalén.
Piedra del Segundo Templo de Jerusalén con inscripción en hebreo: "Hacia el lugar donde suenan las trompetas".
El candelabro de los siete brazos figura entre los expolios del Templo de Jerusalén. Relieve del Arco de Tito , Roma .
El Kotel es uno de los pocos vestigios arquitectónicos del Templo de Jerusalén. Los grandes bloques visibles en esta fotografía se remontan a la Antigüedad . [ 23 ]
Muro de las Lamentaciones , parte del muro de contención de la explanada del Templo venerado debido a su relación con la presencia divina ( Shejiná ).
La así llamada "Roca Fundacional" (hebreo: אבן השתייה, Even Hashetiá; árabe: صخرة, Sajrah), preservada en el interior del Domo de la Roca .