El libro de Zacarías es un libro del Antiguo Testamento perteneciente al canon de la Biblia y del Tanaj judío, atribuido al profeta Zacarías.
A esta se añade otra visión más: Un hombre con una cuerda para medir Jerusalén -la cual Yahveh protegería- siendo "muralla de fuego en torno, y gloria dentro".
En el capítulo tercero, Satán acusaba al Sumo Sacerdote Josué.
Este capítulo confuso se ha prestado a diversas interpretaciones mesiánicas.
Al capítulo cuarto corresponde la visión del candelabro con siete ojos y dos ramos de olivo, que representaban a dos Ungidos.
Y se añade una nueva visión: una mujer sentada sobre una medida que simboliza el mal.
Un pronóstico de felicidad para Jerusalén es el tema del capítulo octavo: se menciona que en la ciudad habrá niños jugando en las plazas, en las cuales se sentarían ancianos y ancianas con su bastón en la mano.