En la mitología griega, Atlante o Atlas (en griego antiguo Ἄτλας, ‘el portador’, de τλάω tláô, ‘portar’, ‘soportar’)[1] era un titán de segunda generación al que Zeus condenó a cargar sobre sus hombros la bóveda celeste.
[16] Con su consorte fue padre de diversas ninfas astrales colectivas, las Pléyades, las Híades y las Hespérides.
[17] También nació de esta unión un hijo, Hías o Hiante, catasterizado como la constelación del Aguador.
Entonces Perseo sostuvo la cabeza de Medusa ante los ojos del Titán, y así lo convirtió en una enorme piedra a la que se llamaría cordillera del Atlas[41] (recientemente se ha descubierto en el Parco delle Madonie).
Heracles lo engañó de nuevo, pidiéndole que sujetase el cielo un momento para acomodarse su capa.
Afirmaba en su Biblioteca histórica que Atlas o Atlante era un mítico rey de Mauritania, en Libia.
[16] Atlas se casó con Hesperis, hija de su hermano Héspero, con la que tuvo a las seis Hespérides, también llamadas Atlántides.
Mientras tanto, los piratas secuestraron a las muchachas mientras éstas jugaban en un jardín, y se marcharon con ellas.
Tras saber por las Hespérides lo que ocurría, mató a todos los piratas y devolvió a las muchachas a su padre Atlas, quien como recompensa le dio las ovejas de oro (adviértase que en griego μήλο mēlo puede significar ‘oveja’ o ‘manzana’) que le había pedido el rey Euristeo de Micenas.