Cinco murieron cuando plañían por este hermano, y Zeus las convirtió en estrellas, las llamadas Híades.
Sus hermanas lo lloraron hasta el punto de ser consumidas por este llanto.
[5] Otros dicen que las Híades eran así llamadas porque eran hijas de Hiante y una tal Beocia.
[6] Se dice que aún no tenía cargados sus hombros Atlas con el Olimpo, cuando nació Híade, digno de ver por su belleza.
Mientras tenía una incipiente pelusa, aterrorizaba a los asustadizos ciervos y la liebre era una presa bonita.