Las nuevas potencias navales como Alemania, Japón y Estados Unidos comenzaron a establecer sus flotas de pre-dreadnought, mientras que armadas como las de Gran Bretaña, Francia y Rusia se expandían con ellos para hacer frente a estas nuevas amenazas.
[2] Estas docenas de acorazados quedaron repentinamente obsoletos con la aparición del HMS Dreadnought en 1906.
[3] Los acorazados previos quedaron desfasados y señalados desde ese momento como pre-dreadnought, mientras que los nuevos acorazados, que seguían las pautas de diseño marcadas por el nuevo buque, serían conocidos desde entonces como dreadnought; a pesar de esto, los acorazados pre-dreadnought jugaron un importante papel en la Primera Guerra Mundial e, incluso, llegaron a participar algunas unidades en la Segunda Guerra Mundial.
Solo ocho años después fue botado el primer monitor con parapeto, el HMVS Cerberus, seguido tres años después del HMS Devastation, un buque mucho más parecido a un acorazado y el primer monitor oceánico de parapeto.
El Devastation era un monitor con parapeto, construido para atacar costas y puertos; debido a su muy bajo francobordo, carecía de la navegabilidad necesaria para combatir en alta mar, ya que su cubierta podría verse barrida por el agua e interferir el trabajo de sus cañones.
[5] Las principales armadas del mundo aún continuaron construyendo buques con mástiles, sin torretas y con suficiente francobordo para combatir en alta mar.
Los Majestic proporcionaron un modelo para la construcción de acorazados en la Royal Navy y en otras armadas para los años siguientes.
Estos cañones tenían inicialmente una baja cadencia de disparo y una precisión limitada; sin embargo, era el único armamento con suficiente potencial como para penetrar el blindaje que protegía las máquinas, santabárbaras y armamento principal de los acorazados enemigos.
El propelente estaba incluido en un cartucho con mecanismo de ignición posterior para permitir una rápida recarga.
[16] Poco después de que la Armada de los Estados Unidos volviera a utilizar la batería intermedia, las armadas británica, italiana, rusa, francesa y japonesa pusieron en grada buques con batería intermedia.
Los buques con un armamento secundario uniforme y de grueso calibre son nombrados en ocasiones como semi-dreadnought.
[11] Adicionalmente a su armamento artillero, algunos acorazados pre-dreadnought estaban equipados con tubos lanzatorpedos, que podían localizarse tanto sobre la línea de flotación como bajo esta.
Este «reducto central» estaba dedicado a proteger la maquinaria hasta de los más potentes proyectiles.
[22] Este blindaje ligero era para prevenir que los proyectiles de alto poder explosivo arruinaran las superestructuras del buque.
Este esquema fue reemplazado por un blindaje más efectivo de acero reforzado usando el proceso Harvey, desarrollado en Estados Unidos.
Las calderas acuotubulares Belleville fueron introducidas en la flota francesa a principios de 1879, pero hasta 1894 no llegaron a la Royal Navy, donde fueron adoptadas para los cruceros acorazados y pre-dreadnought; otras calderas acuotubulares fueron adoptadas por armadas de todo el mundo.
[30][31] La Guerra Hispano-Estadounidense de 1898 vio la misma situación, con pre-dreadnought en la flota estadounidense enfrentándose a los cruceros españoles.
La Royal Navy británica, se mantuvo como la mayor flota del mundo, sin embargo, tanto los rivales tradicionales, como las nuevas potencias, intentaron terminar con esta supremacía.
[34] Las clases Royal Sovereign y Majestic fueron seguidos por un programa regular de construcción a un ritmo mucho más rápido que en años anteriores.
[35] Contando los dos buques ordenados por Chile, pero tomados por Gran Bretaña, la Royal Navy, poseía 39 acorazados pre-dreadnought listos o en construcción en 1904, comenzando la cuenta con los Majestic.
[36] La Jeune Ecole retenía aún una fuerte influencia en la estrategia naval francesa, y a finales del siglo XIX, Francia abandonó la competición con Gran Bretaña en lo que al número de acorazados se refiere.
Estos buques, se anticipaban a lo que sería el concepto del crucero de batalla.
Tras su victoria y al sentir la presión rusa en la región, Japón encargó otros cuatro pre-dreadnoughts, para unirse a los dos de la clase Fuji que ya poseía.
En 1906, fue dado de alta el HMS Dreadnought que dejó obsoletos a todos los acorazados existentes.
Con una mayor potencia de fuego, y más maniobrable que sus oponentes, dejó anticuados a todos los diseños existentes.
[48] Sin embargo, los pre-dreadnoughts continuaron en servicio activo y vieron un número significativo de acciones, aún cuanto estaban obsoletos.
[49] El único pre-dreadnought preservado hoy en día es el que fuera buque insignia de la Armada Imperial Japonesa en la batalla de Tsushima, el Mikasa, que se puede visitar en Yokosuka, donde permanece como buque museo desde 1925.
Los avances en maquinaría y armamento, hicieron que un pre-dreadnought no fuera necesariamente equiparable a un crucero acorazado moderno, y que estuviese totalmente en desventaja frente a un moderno acorazado dreadnought o crucero de batalla.
Su escasa velocidad, implicó que los cruceros británicos lo dejaran atrás en la desastrosa batalla de Coronel.
El principio de que los pre-dreadnoughts estaban disponibles para ser utilizados donde no debía arriesgarse ningún buque moderno, fue adoptado por las armadas británica, francesa y alemana, por lo que pasaron a ser utilizados en escenarios secundarios durante la guerra.