Batalla de Jutlandia

Los británicos perdieron más barcos y hombres, pero evitaron caer en la emboscada de Scheer.

En su lugar, la Marina Alemana recondujo sus esfuerzos y recursos hacia una guerra submarina sin restricciones.

En esta época, la disposición típica para una batalla naval consistía en disponer la flota en columnas paralelas, con los barcos moviéndose en fila india para permitir una gran maniobrabilidad.

Este sistema también garantizaba mejores comunicaciones en una época en que las órdenes se daban rara vez por radio (invento muy reciente), prefiriéndose el uso de las tradicionales banderas y focos luminosos.

La estrategia naval alemana, en palabras del propio Scheer, tenía como objetivo Dado que en 1916 la Flota de Alta Mar Alemana sólo tenía 18 acorazados frente a los 33 de la Gran Flota Británica, y a que los alemanes se estaban quedando cada vez más atrás en la carrera naval conforme avanzaba la guerra, no había ninguna posibilidad de derrotar a los británicos en un combate naval convencional.

Sin embargo, para aquel entonces los británicos se habían hecho con los códigos de codificación alemanes (cosa que éstos ignoraban) y podían descifrar todas las comunicaciones por radio del enemigo.

Gracias a esto el Almirantazgo británico quedó enterado de la trampa y pudo esquivarla sin problemas.

Esta superioridad numérica se veía contrarrestada, sin embargo, por ciertos factores técnicos: Los barcos alemanes tenían un blindaje antitorpedo más grueso; una división interna más simple y eficaz derivada del hecho de que la mayoría de los navíos germanos estaban concebidos para realizar viajes cortos en el mar del Norte y por tanto no empleaban una gran parte de su espacio en camarotes para sus marineros quienes descansaban en tierra cuando atracaban, y los proyectiles alemanes eran superiores a los británicos que utilizaban munición explosiva antes que perforante.

Mientras que el objetivo británico era entretener y "desgastar" a los alemanes hasta la llegada de la Gran Flota, los alemanes planeaban atraer a la fuerza británica, contra el grueso de sus fuerzas, retrocediendo hasta ella.

En cuanto Beatty y Evan-Thomas se dieron cuenta de la trampa en la que estaban cayendo rectificaron 180 grados y pasaron a rumbo norte para reunirse cuanto antes con el resto de la armada inglesa dirigida por Jellicoe.

Mientras Beatty y Evan-Thomas dirigían sus flotas al norte para reunirse con Jellicoe resultó que ahora ellos se habían convertido en el cebo para atraer la armada alemana hacia la inglesa.

Durante el cañoneo numerosos barcos de ambas flotas quedaron dañados en mayor o menor medida.

Al amanecer los ingleses abandonaron el HMS Warrior, muy dañado por los proyectiles alemanes, que se hundió en la mañana del 1 de junio.

No solo perdieron menos buques a la vez que causaban un daño considerable a la Royal Navy, sino que además sus buques resistieron mejor el castigo, su artillería fue mucho más efectiva y sus comandantes actuaron eficazmente en las acciones nocturnas.

El 31 de mayo, el servicio principal se celebró en la Catedral de San Magnus en las Orcadas, al que asistieron el primer ministro británico, David Cameron, y el presidente alemán, Joachim Gauck, junto con la princesa Ana y su marido, el vicealmirante Sir Timothy Laurence.

Acorazados de la Flota de Alta Mar alemana durante la guerra mundial.
El HMS Queen Mary británico explota durante la batalla
(1) 15:22, Hipper mira hacia Beatty.
(2) 15:48, Primeros disparos de la escuadra de Hipper.
(3) 16:00-16:05, Indefatigable explota dejando dos supervivientes.
(4) 16:25, Queen Mary explota, nueve supervivientes.
(5) 16:45, los cruceros de batalla de Beatty se mueven fuera del alcance de Hipper.
(6) 16:54, los acorazados de Evan-Thomas giran hacia el norte detrás de Beatty.
(1) 18:00 Las fuerzas de exploración se reincorporan a sus respectivas flotas.
(2) 18:15 la flota británica se despliega en la línea de batalla
(3) 18:30 la flota alemana bajo fuego se aleja
(4) 19:00 la flota alemana regresa
(5) 19:15 la flota alemana se aleja por segunda vez
(6) 20:00
(7) 21:00 Anochecer: Jellicoe asume la formación de crucero nocturno
El crucero de batalla inglés HMS Invincible , hundido durante la batalla.
El acorazado alemán SMS Seydlitz resultó gravemente dañado y sufrió 98 muertos y 55 heridos.