El barrio antiguo de la ciudad posee una alcazaba y una mezquita del siglo XVIII.
[2] La palabra deriva de la raíz bereber para "león" (Tahert y Souk Ahras).
El nombre es conocido en múltiples idiomas bereberes, como sinónimos de uharu y ahra.
Una leyenda local popular relata que en el periodo del 900 a. C., fueron vistos leones en la zona.
Los veranos son calurosos y secos con temperaturas medias en el mes más cálido cerca de los 32 grados centígrados.
Los inviernos son suaves con altas temperaturas en el mes más frío con alrededor de 17°C.
Orán fue fundada en el siglo X por comerciantes musulmanes andalusíes liderados por Mohammed Ibn Abi-Aoun y Mohammed Ibn-Abdoun como centro de intercambio entre el norte de África y Al-Ándalus (Ibn Khaldoun, Histoire des dynasties musulmanes et des tribus árabes et berbères, Alger, 1852.
Esta migración sucedió tras la revuelta antijudía de 1391 en Sevilla cuando, dada la debilidad en que había quedado la comunidad de Mallorca, los judíos optaron por cruzar a África, para poder practicar su religión y evitar que los obligaran a convertirse al cristianismo.
Esta característica la compartía únicamente con Melilla, también española, y otro puerto en la actual Túnez.
[5] Además, al encontrarse la plaza expuesta a las razias y traiciones de las poblaciones vecinas, se mandó dar instrucción militar a los vecinos desde edades muy tempranas, por lo que eran apreciados como soldados de los Tercios.
Además tenían encargada la defensa del enclave y las acciones en otras plazas como en el caso de Argel (1541), Mostaganem (1546 y1550) o cabo Figal (1605).
[8]Por otra parte, sufrió sucesivos asedios como el de 1563, que resultaron en victoria española.
En estos casos, se les permitía conservar su capital personal y se trasladaban a Orán con todo su séquito para redimir sus penas y recuperar el favor de la Corona con méritos de guerra.
Para asegurar este monopolio se había dejado sin relevancia en 1531 el puerto de One.
Ante la pérdida del control español sobre Orán, la piratería en las costas peninsulares se incrementó en este periodo.
En 1822 el Bey de Argel declaró la guerra a España, siendo el casus belli unas supuestas deudas contraídas por españoles y judíos afines a España en Orán y Argel.
Nunca hubo balance oficial, aunque en la actualidad se estima en unos 700 los pied noirs asesinados y otros 100 musulmanes partidarios de la Argelia francesa.
La mitad de Orán se encontró entonces desierta y las viviendas abandonadas son rápidamente apropiadas indebidamente tras la independencia.
Cuarenta años después, en 1961, la cifra total de población pasa a 433.000 personas.
Pero pese a que la población europea se había doblado, aumentando a 213.000 personas, la población argelina se multiplica por once, hasta alcanzar las 220.000 personas, habiendo mejorado sus condiciones higiénicas y médicas gracias a la aportación cultural Europea y evitando así sus altísimas tasas de mortalidad infantil anteriores.
Cada distrito dispone de una delegación barrial que administra las gestiones técnicas, políticas y sociales.
Se trata de la población que está experimentando un mayor desarrollo social en los últimos años.
Una parte significativa del patrimonio arquitectónico se encuentra en Sidi El Houari, un barrio empobrecido.
En la época colonial, incluso consta que se llegaron a celebrar en Orán las Hogueras de San Juan.
Entre Alicante y este puerto argelino también hay un especial contacto en la actualidad, ya que ambas ciudades las une el Ferry Argelia, en la operación Paso del Estrecho.
Oran es la capital del raï, estilo musical procedente de antiguas tradiciones argelinas.
El célebre hidalgo Don Quijote de Cervantes contiene una etapa en Orán.
Una parte del romance Clovis Dardentor (1896) de Julio Verne se desarrolla en la ciudad.
Las más célebres referencias son sin duda las de Albert Camus en su novela La Peste (1947) y en su ensayo El verano.
Pese a que esta fiesta es rechazada hoy en día por algunas corrientes religiosas, su celebración es muy importante en la ciudad.