La palabra carbonilo puede referirse también al monóxido de carbono como ligando en un complejo inorgánico u organometálico (e.g.
He ahí la terminación "-ilo" respectiva a todos los sustituyentes con valencias disponibles en el carbono.
Los otros dos orbitales de enlace están cada uno ocupados por un electrón del carbono y uno del oxígeno, formando enlaces covalentes (polares) con una polarización de C → O inversa, ya que el oxígeno es más electronegativo que el carbono.
Los dobles enlaces carbono-oxígeno son significativamente más largos, por ejemplo, 120.8 pm en formaldehído.
El primer miembro, el ordinario monóxido de carbono CO, parece ser el único que es estable en estado puro a temperatura ambiente.
Los miembros superiores a n=9 han sido obtenidos también mediante una descarga eléctrica en C3O2 gaseoso diluido en argón.
Estos compuestos son considerados inorgánicos, a menos que el contraión catiónico sea orgánico.
A las sales dibásicas y los diésteres del ácido carbónico se les denomina carbonatos.
Por lo tanto, puede considerarse conceptualmente como un grupo funcional diferenciado de los ácidos carboxílicos típicos.
A este grupo funcional en particular se le llama en química orgánica éster por antonomasia.
En estos compuestos el grupo carbonilo está conjugado con un alqueno, y de esto provienen algunas propiedades especiales.
El grupo carbonilo, sea aldehído o ácido, atrae hacia sí los electrones del alqueno, y entonces el grupo alqueno en un compuesto carbonílico insaturado está desactivado hacia electrófilos como el bromo o el cloruro de hidrógeno.